El ex futbolista brasileño Zico dijo ayer que le gustaría que el actual técnico del Sao Paulo, Muricy Ramalho, asuma el comando de la selección en lugar de Luiz Felipe Scolari.
«Mi candidato es Muricy Ramalho. Él es uno de los mayores campeones del fútbol brasileño. Sabemos que el Campeonato Brasileño es uno de los más difíciles del mundo y él fue uno de los mayores campeones del fútbol de aquí», dijo Zico.
Aunque aún no fue anunciada, la salida de Scolari es vista como un hecho a raíz de la estrepitosa derrota de Brasil ante Alemania, que goleó a la selección anfitriona por 7-1 el martes en la semifinal del Mundial de Brasil 2014.
Zico recordó que Ramalho, quien condujo al Santos a conquistar la Copa Libertadores de América en 2011, ya fue invitado por la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) para asumir el plantel nacional en 2010, en sustitución de Carlos Dunga, pero que en su momento no aceptó.
«Él trabajó bien en las categorías de base» de los equipos que entrenó, agregó el ex jugador de 61 años.
Ramalho entrenó, además del Santos y el Sao Paulo, al Internacional de Porto Alegre, Fluminense, Palmeiras y Botafogo, entre otros.
Respecto a Scolari, campeón con Brasil en Corea/Japón 2002, y su coordinador técnico, Carlos Alberto Parreira, campeón mundial en Estados Unidos 1994, Zico dijo que hay que «agradecerles» por todo lo que han aportado al fútbol brasileño, pero que ahora hay que pensar en renovación.
«Pero ahora debe haber una nueva comisión técnica y forma de pensar el fútbol», afirmó.
Las críticas más duras esgrimidas por el «Pelé Blanco» fueron dirigidas a la CBF, a la cual acusó de ser «acomodada» y no colaborar con los clubes para que les puedan ofrecer mejores condiciones a los jugadores, de manera de que éstos elijan permanecer en Brasil.
«La CBF no hace nada por el fútbol brasileño. La política de la CBF no es beneficiosa para Brasil, es benéfica para el fútbol europeo», aseveró.
En su opinión, el fracaso de la «caraninha» en el Mundial brasileño se debe a varios factores, entre otros a no apostar en las divisiones menores, a la falta de escuelas de fútbol y a que la mayoría de los jugadores de la selección no son referentes en sus respectivos equipos.
«Si observamos, uno a uno a los jugadores, todos, o casi todos, han jugado en forma intermitente en las últimas temporadas, una vez sí, dos no, ya sea por lesión o porque quedan en el banco», afirmó.
Por último, consideró que a Brasil le está faltando «humildad» para admitir los errores que la llevaron a sufrir la peor goleada de su historia.
«Lo mejor hubiera sido calzarse las sandalias de la humildad y admitir los errores. (…) Pero lo único que se escuchó fue que hubo un ‘apagón’», afirmó. «Mientras se siga diciendo eso no veo posibilidades de que cambie nada», lamentó.