Zelaya acrecienta su imagen


El presidente depuesto Manuel Zelaya junto a la presidenta argentina Cristina Kirchner en la reunión celebrada en El Salvador.

El derrocado presidente de Honduras, Manuel Zelaya, no logró su objetivo de llegar a Tegucigalpa el domingo pero la imagen de las nuevas autoridades hondureñas se ha empañado aún más a ojos de la comunidad internacional con las dos personas muertas en una manifestación.


FOTO LA HORA: YURI CORTEZ

Seguidores de Zelaya muestran la sangre de uno de los manifestantes herido durante la jornada.» title=»FOTO LA HORA: YURI CORTEZ

Seguidores de Zelaya muestran la sangre de uno de los manifestantes herido durante la jornada.» style=»float: left;» width=»250″ height=»369″ /><img decoding=

DIíLOGO De «buena fe»


Las autoridades de Honduras propusieron ayer entablar un diálogo «de buena fe» con la OEA, informó la vicecanciller del gobierno de facto, Martha Lorena Alvarado, aunque el presidente designado Roberto Micheletti aseguró que no tiene que «negociar con nadie más que con la población hondureña».

Tras un «consenso» de los poderes de Honduras, el nuevo gobierno ha propuesto a la Organización de Estados Americanos (OEA) «la puesta en marcha de un diálogo de buena fe entre una delegación de la República de Honduras (…) y una delegación de representantes de Estados miembros junto con funcionarios de menor rango de la secretarí­a general», según un comunicado leí­do por la funcionaria.

Eso a condición de que «mientras el diálogo de buena fe esté en curso no han de producirse actos o situaciones que puedan poner en peligro la paz social de la República y comprometer el esfuerzo de las conversaciones», según el texto de la propuesta enviado al representante de la OEA en Tegucigalpa, Jorge Miranda.

Sin embargo, el presidente surgido del golpe de Estado aseguró poco después del anuncio de Alvarado: «no tengo que negociar con nadie más que con la población hondureña», al ser preguntado en rueda de prensa.

«He llegado aquí­ por una sucesión constitucional», dijo. Agregó que es un «acto legal» ya que fue nombrado por el Congreso Nacional «en representación del pueblo hondureño».

Alvarado aseguró que Honduras está esperando «con los brazos abiertos» a la comunidad internacional y enseñarle «toda la documentación y todos los elementos para que hagan un juicio imparcial y no se nos juzgue a priori como con la venida de (José Miguel) Insulza», secretario general de la OEA.