Zapatero defiende Presidencia española


El jefe del gobierno español, José Luis Rodrí­guez Zapatero, defendió el martes en el Europarlamento el balance de su Presidencia rotativa de la UE, aplaudido por su familia socialista pero criticado por el resto, que le reprochó falta de avances frente a la crisis.


La presidencia semestral de España, finalizada el 30 de junio y traspasada a Bélgica, ha «generado resultados de gran calado» para fortalecer la polí­tica económica de la Unión Europea (UE) y evitar que el bloque vuelva a caer en una crisis presupuestaria que desató el pánico en los mercados, declaró Zapatero al comparecer ante el Parlamento Europeo en Estrasburgo (Francia).

Zapatero se refirió al rescate financiero a Grecia para evitar su quiebra, al fondo de 750.000 millones de euros aprobado para acudir en ayuda de los paí­ses de la Eurozona en apuros o al refuerzo del rigor presupuestario, con medidas, todaví­a en estudio, para forzar a los Estados europeos a ser más cuidadosos con sus cuentas públicas so pena de recibir nuevas sanciones.

Son «avances sustanciales», que serán complementados con una mayor supervisión del sistema financiero y por la publicación, a fines de mes, de las pruebas de solvencia de los bancos europeos, que contribuirá a «restaurar parte de la confianza» en la fortaleza económica de Europa, defendió Zapatero.

El gobierno español asumió la presidencia rotativa del bloque cuando Europa salí­a de la recesión económica pero al mismo tiempo enfrentaba la crisis presupuestaria de Grecia y los riesgos de contagio a Portugal, Italia e incluso a España, que provocaron el desplome de las bolsas y una brutal devaluación del euro frente al dólar.

Para Zapatero, el cargo de liderazgo de la UE llegó en mal momento: España, uno de los últimos paí­ses en salir de la recesión y el que registra la mayor tasa de desempleo del bloque, pasó a ser blanco de los mercados, obligándole a lanzar un polémico plan de austeridad que contrarió a la mayorí­a de españoles.

«Quiero rendir homenaje a España por su presidencia, que ha sido muy positiva y acertada en un contexto difí­cil», concedió en el hemiciclo el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso.

La presidencia española ha tenido «éxitos excelentes», al conseguir frenar los «ataques especulativos» contra el euro, se felicitó por su parte el lí­der de los socialistas europeos, Martin Schulz.

Pero los elogios a Zapatero acabaron ahí­: tanto eurodiputados conservadores como de la extrema izquierda y los ecologistas echaron en cara una reacción tardí­a a la crisis actual y otras decepciones como la anulación de las cumbres con Estados Unidos y de la Unión por el Mediterráneo.

Con España se ha seguido «llegando tarde y mal, improvisando una vez más» ante la crisis económica, arremetió el eurodiputado español Jaime Mayor Oreja, del Partido Popular Europeo.

La presidencia ha sido como el «Mundial de Torres: con grandes expectativas y luego decepcionando un poco», declaró el alemán Alexander Graf Lambsdorff, vicepresidente del grupo conservador ADLE, en alusión a la actuación del jugador de la selección española Fernando Torres en el campeonato de fútbol.

El lí­der de los Verdes, Daniel Cohn-Bendit, criticó por su parte que se pretenda reactivar el crecimiento económico aprobando planes de austeridad, cuando lo que se necesita son «inversiones».

La estrategia económica también fue cuestionada por el español Willy Meyer, de la Izquierda Unitaria Europea, al estimar que los planes de ahorro «castigan a trabajadores y pensionistas que no son los responsables» de la crisis.

Muchos eurodiputados lamentaron también el desplante a la UE del presidente estadounidense, Barack Obama, que anuló una cumbre bilateral prevista en Madrid durante la presidencia española.

«Hubiese sido una buena ocasión para recuperar las relaciones (con Estados Unidos), es un tiempo perdido», declaró el lí­der de los populares europeos, Joseph Daul.