XII aniversario de asesinato


Efeméride. Ehud Olmert, primer ministro de Israel, posa frente a un retrato de Yitzhak Rabin, justo el dí­a en que se conmemoran los doce años de su asesinato. (AFP / La Hora)

Israel conmemoraba hoy el duodécimo aniversario del asesinato del primer ministro Yitzhak Rabin sobre el fondo de la campaña de la extrema derecha en favor de la liberación de su asesino que suscita la indignación del paí­s.


El 4 de noviembre de 1995, Yigal Amir, un judí­o ortodoxo de la extrema derecha israelí­, disparó tres tiros a Rabin por la espalda en Tel Aviv, con el objetivo de hacer fracasar los acuerdos de paz israelo-palestinos de Oslo de 1993.

El duodécimo aniversario del crimen es hoy, según el calendario lunar hebreo.

Ese asesinato, cometido durante una gran manifestación pacifista, sumió a Israel en el estupor y dio una estocada a una posible solución para el conflicto israelo-palestino.

«Estaba al lado de Rabin; su rostro era radiante al ver la manifestación de apoyo. Pero el enemigo despiadado le esperaba frí­amente con una pistola cargada en la mano», recordó el martes por la noche el presidente de Israel, Shimon Peres.

«El asesino le disparó en la espalda pero golpeó a la nación en el corazón. La historia y el pueblo no perdonarán jamás esa ignominia», añadió Peres, negando así­ cualquier posible medida de gracia para Ygal Amir.

La ceremonia oficial empezará a las 15.00 horas locales (13H00 GMT) en el cementerio del monte Herzl, en Jerusalén, donde se encuentra la tumba de Rabin.

En el acto participarán Peres y el primer ministro, Ehud Olmert.

A continuación, la Knesset (Parlamento) dedicará una sesión extraordinaria al aniversario, que este año se conmemora en medio de la polémica desencadenada por la campaña de la extrema derecha para lograr la liberación de Amir.

Los ultraortodoxos han previsto organizar en Tel Aviv una contra conmemoración para «revelar el auténtico rostro de Rabin», declaró Katty Cohen, una de sus organizadoras.

Yigal Amir, de 37 años, cumple cadena perpetua y nunca ha expresado remordimiento por el asesinato de Rabin.

En un ví­deo del que recientemente se editaron 150.000 ejemplares, la madre del asesino afirma que su acción estaba «predestinada» por su nombre, Yigal, que significa «salvador» en hebreo.

«Decidí­ matarlo para neutralizarlo polí­ticamente. No lamento nada», declaró Amir en un interrogatorio llevado a cabo horas después de cometer el crimen y hecho público el lunes por la policí­a.

El asesino añadió que habrí­a podido matar también a Peres, pero sólo era para él «un blanco secundario».

La prensa israelí­ habló la semana pasada de un refuerzo de la seguridad del presidente israelí­ debido a una violenta campaña denigratoria en su contra en sitios internet de los ultranacionalistas israelí­es.

Yigal Amir, por su parte, se casó en la cárcel en 2004. Su mujer, Larissa Trimbobler, una divorciada de 42 años y ya madre de cuatro hijos, está embarazada actualmente.

Por su parte, Dalia Rabin, la hija de Rabin, lamentó el martes que Amir no hubiera sido ejecutado.

Yitzhak Rabin, jefe del Estado Mayor israelí­ durante la Guerra de los Seis Dí­as en la que Israel conquistó en 1967 Cisjordania y la franja de Gaza, recibió el Premio Nobel de la Paz en 1994 junto con su entonces ministro de Relaciones Exteriores, Shimon Peres, y el lí­der palestino, Yasser Arafat, por la firma de los acuerdos de Oslo.