El mandatario Otto Pérez Molina y la vicepresidenta de la República, Roxana Valdetti, visitaron la comunidad de Pocohíl Segundo, Chichicastenango, Quiché, para constatar los daños ocasionados por el terremoto del pasado 7 de noviembre, lugar donde 21 casas quedaron totalmente destruidas y 50 más resultaron con daños.
El Presidente ofreció su apoyo a las y los afectados e indicó que están realizando los trabajos de evaluación, los que deben estar concluidos al menos en una semana y así determinar con exactitud cuántas familias fueron afectadas para luego iniciar con la fase de reconstrucción.
Pérez dijo que no se repararán las casas sino que serán derribadas totalmente para construir nuevas y garantizar la seguridad de quienes las habitan y agregó que con el apoyo de la iniciativa privada y de algunos préstamos ya aprobados se iniciarán los trabajos.
El mandatario hizo un llamado a no dejar que personas se aprovechen de la situación realizando cobros ilegales y dijo que sólo la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (CONRED) y los Centros de Operaciones de Emergencia (COE) están autorizados a manejar los datos oficiales.
De acuerdo con el Mandatario, la Vicepresidenta fue designada para supervisar y coordinar todo el tema de la reconstrucción y destacó que ya se han identificado 60 millones de dólares en préstamos, además de 250 millones presupuestados, que serán re direccionados mediante transferencias.
Por su parte, Roxana Baldetti, vicepresidenta de la República, dijo que ya hay conversaciones con varias empresas para conseguir materiales a bajo costo, con el fin de ayudar a más familias.
Para Baldetti será una labor muy difícil la reconstrucción, pero no imposible; que se priorizará y apoyará a las personas más afectadas y necesitadas del lugar aseguró.
La comitiva presidencial estuvo acompañada del Ministro de Gobernación, Mauricio López Bonilla, quien declaró que se está analizando la seguridad en los lugares afectados; también estuvieron presentes la Ministra de Desarrollo Social y el Director Nacional del Fondo Nacional para la Paz (FONAPAZ).
Después de visitar algunas casas derrumbadas la comitiva se dirigió a la escuela de la comunidad, ahora convertida en albergue donde las familias han pernoctado desde que sucedió el movimiento telúrico.