Los fuerzas de los tribunales islámicos de Somalia se retiraron hoy de varias posiciones en el sur y centro del país que fueron blanco de violentos ataques de Etiopía en los últimos días, según responsables islámicos y habitantes.
Tras seis días de violentos combates contra las fuerzas gubernamentales y el ejército etíope, los islamistas se retiraron de las ciudades de Dinsoor (120 km al suroeste de Baidoa, ciudad sede del gobierno de transición) y de Burhakaba (60 km al sureste de Baidoa).
«Hay mucha presión en todas las líneas del frente y con el objetivo de ganar esta guerra, los combatientes islamistas han evacuado varias posiciones, entre ellas Dinsoor y Burhakaba», declaró a la AFP un comandante de las fuerzas de los tribunales islámicos que pidió el anonimato.
El comandante se negó a hablar de derrota y explicó que esta acción «es una táctica militar, es una suerte de retirada militar».
La retirada tuvo lugar un día después de que aviones de guerra etíopes bombardearan dos aeropuertos en Somalia, entre ellos el de Mogadiscio, tomado por las milicias islamistas desde junio como parte de su lucha contra el gobierno de transición, en una nueva escalada de un conflicto que corre el riesgo de propagarse a todo el Cuerno de Africa.
En Burhakaba, los islamistas abandonaron la ciudad, dejando atrás equipamiento y material de combate, dijeron sus habitantes.
«Este martes (de mañana) no vemos a ningún combatiente islamista, todos partieron durante la noche (…) Dejaron equipamiento en las posiciones donde estaban instalados», contó Osman Adan Rafiyo, habitante de la ciudad y dirigente de una asociación local.
En Dinsoor, «no dormimos por los violentos combates que duraron hasta la medianoche», explicó otro habitante, Mahdi Abdirasak.
«Pero finalmente los combatientes de los tribunales abandonaron la ciudad y retiraron a todos sus hombres. Las fuerzas del gobierno aún están fuera de la ciudad y todo el mundo se encuentra conmocionado», agregó.
«Vi varios vehículos blindados de los islamistas atravesar la ciudad a toda velocidad. Pienso que fueron vencidos», estimó.
En el segundo frente de combate, en el centro del país, los habitantes dijeron que las fuerzas gubernamentales y el ejército etíope avanzaban.
«De Bandiradley (630 km al norte de Mogadiscio) a Adado (40 km al sur de allí), toda la zona fue tomada por las fuerzas gubernamentales apoyadas por los etíopes. Es muy triste para los islamistas que no hayan ganado», declaró un habitante de Adado, Gaarane Ali Jumale, contactado por la AFP desde la capital somalí.
Las fuerzas del gobierno de transición somalí y el ejército etíope se enfrentan desde el 20 de diciembre con los combatientes de los tribunales islámicos -que controlan la mayoría del centro y sur de Somalia-, principalmente cerca de Baidoa (sur) y en el centro del país.
Somalia se haya en guerra civil desde 1991.
Las instituciones de transición somalíes, instaladas en 2004, se confiesan incapaces de restablecer el orden en el país frente al aumento de influencia de los islamistas desde el 2006.
Washington acusa a los islamistas de estar vinculados a la organización terrorista Al Qaida, pero los rebeldes lo niegan.