Un violento temporal que azota el norte y centro de Europa desde hoy por la mañana causó nueve muertos y daños materiales sobre todo en Gran Bretaña, Alemania, Francia y Holanda.
La tempestad, que se espera dure hasta última hora de la jornada y alcance vientos de hasta 200 km/h, sobre todo en la costa alemana del mar Báltico.
En el Reino Unido, los vientos causaron tres muertos, dos automovilistas y una mujer que fue aplastada al caer un muro.
En Alemania, donde la tempestad fue bautizada con el nombre de «Kyrill» por el Instituto de Meteorología de la Universidad Libre de Berlín, también fallecieron tres personas, un conductor al derrumbarse un árbol, un bebé por la caída de una puerta y un anciano.
En Holanda la tempestad causó dos víctimas, dos automovilistas que murieron al caer un árbol sobre su vehículo en el centro del país.
La última víctima se registró en Francia, donde una mujer que iba en un vehículo fue alcanzada por un poste eléctrico que cayó.
En el océano Atlántico, los 26 miembros de la tripulación de un portacontenedores británico estaba a punto de naufragar en el oeste de Francia fueron rescatados sanos y salvos.
En la región del canal de la Mancha, el viento soplaba a una velocidad de entre 120 y 130 km/hora y en la región de Vosges (este de Francia), la velocidad de los vientos llegaba a 150 km/hora.
En total, 15 departamentos franceses están en «alerta naranja», tercer nivel de alerta meteorológica en una escala de cuatro.
Alemania activó la alerta nacional por huracán desde el jueves por la tarde al viernes por la mañana. Las autoridades pidieron a la población que limite los viajes, ya que el viento alcanzó los 169 km/h en el centro del país.
Se esperaba que la tormenta arreciara entre las 15H00 GMT y las 23H00 GMT en Alemania y los servicios de seguridad civil movilizaron a 40.000 efectivos.
Las escuelas cerraron en una región del oeste y concluyeron la jornada antes de tiempo en otras zonas del país.
El mal tiempo también perturbó el tráfico aéreo y marítimo. En Frankfurt (Alemania) se anularon 78 llegadas y salidas.
En el mar del Norte, los viajes a las islas Frisias holandesas se redujeron por esperarse vientos de 140 km/h y una subida del nivel de las aguas de entre 2,5 y 3,5 metros. En el mar Báltico no salieron a faenar los pesqueros.
En el Canal de la Mancha se interrumpieron los trayectos entre los puertos franceses y británicos, así como los de los trenes Eurostar y Thalys entre Francia, Londres y Bruselas.
En Francia, unas 67.000 personas se quedaron sin electricidad por la tarde en la región del norte.
En Holanda, la estación principal de Amsterdam fue evacuada por la caída de una parte del tejado por un viento a 130 km/h. En el aeropuerto de Amsterdam-Schiphol se registraron retrasos de más de una hora.
En Kaliningrado, enclave ruso en la Unión Europea, se decretó la alerta hasta el viernes.
Polonia, Austria, República Checa y Hungría anunciaron fuertes vientos hasta el viernes por la tarde.