Vicepresidente de Estados Unidos Biden se reunirá con mandatarios centroamericanos


De izquierda a derecha, Antonio Elí­as Saca, Martí­n Torrijos, Daniel Ortega y Manuel Zelaya, presidentes de El Salvador, Panamá, Nicaragua y Honduras, durante la cumbre del Sica en Managua, Nicaragua. FOTO LA HORA: AFP MIGUEL íLVAREZ

El vicepresidente estadounidense, Joe Biden, se reunirá el lunes en San José con los mandatarios de América Central, quienes le pedirán que la Casa Blanca agregue temas sobre desarrollo y lucha contra la pobreza a su agenda latinoamericana, e impulse una reforma migratoria integral.


La crisis económica también será un plato fuerte en la cita de Biden con los gobernantes de la región, muy dependiente del comercio con Estados Unidos, en la que han caí­do últimamente la producción, las exportaciones y las remesas familiares, y ha aumentado el desempleo.

«Estoy viajando a Centroamérica y Sudamérica para realizar consultas con lí­deres latinoamericanos congregados en Chile y Costa Rica respecto a la cumbre» de las Américas en Trinidad y Tobago en abril, a la que asistirá el presidente Barack Obama, escribió Biden, en un artí­culo publicado este jueves en el diario La Nación.

Biden, quien llegó este viernes a Chile a participar en una cita de lí­deres progresistas, indicó que también hablará sobre «los desafí­os que enfrentan los pueblos de las Américas», entre ellos la «amenaza» del cambio climático.

«Estas reuniones son un primer e importante paso hacia un nuevo dí­a en las relaciones y el desarrollo de una sociedad entre los paí­ses y pueblos del hemisferio», agregó Biden, quien llegará a San José el domingo desde Chile.

Los mandatarios centroamericanos pedirán a Biden que el demócrata Obama amplí­e la agenda con América Latina, focalizada por su antecesor republicano, George W. Bush, en temas de seguridad y drogas.

El anfitrión de la cita, el presidente costarricense, Oscar Arias, dijo que le pedirá que la agenda incluya temas de desarrollo y acciones contra la pobreza.

Centroamérica también le pedirá que Obama impulse una reforma migratoria integral o al menos prorrogue el estatuto de protección temporal que favorece a más de 300 mil migrantes centroamericanos en Estados Unidos, adelantó el mandatario salvadoreño, Antonio Saca.

Sin embargo, el istmo no recibirá a Biden como un bloque unido, pues la propia visita del número dos de la nueva administración estadounidense hizo resurgir recelos, pues algunos gobernantes creen que Arias trata de erigirse en el portavoz de Centroamérica y asumir un papel protagónico como el que le llevó a ganar el Premio Nobel de la Paz en 1987.

Arias cometió «una graví­sima imprudencia al decir que el hecho de que Biden venga a Costa Rica le permitirí­a jugar el papel de interlocutor de Centroamérica y el Caribe ante Estados Unidos», dijo el analista costarricense Rodolfo Cerdas.

«No creo que los demás presidentes estén dispuestos a que quien hable por ellos sea Arias. El no va a poder asumir ese papel», agregó Cerdas.

El presidente nicaragí¼ense, Daniel Ortega, no asistirá a la cita y tampoco lo hará el mandatario hondureño, Manuel Zelaya.

Nicaragua y Honduras integran la Alternativa Bolivariana para las Américas, creada por el presidente venezolano, Hugo Chávez, en oposición al Acuerdo de Libre Comercio de las Américas que promoví­a Washington.

A Ortega, actual presidente del Sistema de la Integración Centroamericana, aparentemente no le agradó que la cita de San José hubiese sido arreglada tras bastidores entre Arias y Washington, en vez de ser convocada por este mecanismo regional.

En la reunión con Biden participarán, además de Arias y Saca, los presidentes ílvaro Colom (Guatemala) y Martí­n Torrijos (Panamá), y el primer ministro de Belice, Dean Barrow.

Por Nicaragua acudirá el vicecanciller, Manuel Coronel, y por Honduras, el vicepresidente Arí­stides Mejí­a.

DIVISIí“N

Centroamérica llegará dividida a la reunión del lunes con el vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden, en Costa Rica, a la que los presidentes de Nicaragua y Honduras no asistirán aduciendo que no es organizada por el Sistema de la Integración Centroamericana (SICA).

A pesar que en la cumbre del SICA que se celebró en Managua el miércoles los presidentes reconocieron la importancia de tener un primer encuentro con el nuevo gobierno de Estados Unidos, no todos asistirán a la cita en San José, como esperaba su anfitrión, el mandatario Oscar Arias, quien virtualmente fue desautorizado a servir como portavoz de la región ante Biden.

En la declaración de Managua, que no fue firmada por el canciller costarricense Bruno Stagno, los presidentes aprobaron la agenda con Biden, en la que el primer punto es el uso de la ví­a diplomática y los organismos regionales de integración como «los canales legí­timos para tratar las agendas bilaterales y multilaterales de los paí­ses».

Los presidentes Daniel Ortega, de Nicaragua, y Manuel Zelaya, de Honduras, reiteraron que no asistirán a la cita con Biden y delegaron en otros funcionarios su representación.

Nicaragua y Honduras son miembros de la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA), creada por el presidente venezolano Hugo Chávez en oposición al Acuerdo de Libre Comercio de las Américas (ALCA) que promoví­a Washington.

Además, las relaciones entre Ortega y Arias no son amistosas y el mandatario costarricense no acudió a la cumbre del SICA en Managua.

«Esta no es una reunión del SICA ya que algunos paí­ses miembros no han sido invitados (…) sino que fue convocada por Costa Rica y el Gobierno de Estados Unidos», sostuvo Ortega al término de la XXV cumbre del SICA.

La exclusión de paí­ses del SICA, como República Dominicana, fue cuestionada por Ortega, que expresó su «solidaridad» al presidente Leonel Fernández, por esa omisión de Arias.

En un tema en el todos «coincidimos» es que las relaciones con Estados Unidos deben ser «justas y respetuosas», sostuvo Ortega, quien delegó a su vicecanciller Manuel Coronel para que le represente en la cita con Biden.

Zelaya coincidió con Ortega en que la cita con Biden no es organizada por el SICA, pero estuvo de acuerdo en que debe dársele la importancia que tiene y llevarle los planteamientos de la región.

La negativa de Ortega serí­a un revés diplomático para Arias, quien según versiones de prensa, recurrió a sus colegas de Panamá, Omar Torrijos, y Guatemala, ílvaro Colom, para que convencieran a Ortega de ir a la reunión.

El presidente salvadoreño, Antonio Saca, confirmó su presencia en la cita en la que «vamos a abordar el tema migratorio» y dijo que propondrá a Estados Unidos que efectúe una reforma migratoria integral.

Saca estimó que el tema es de vital importancia para toda Centroamérica, ya que no sirve mucho que los inmigrantes en Estados Unidos puedan tener empleo a través bajo el Tratado de Protección Temporal (TPS) «si las redadas se están dando en grandes cantidades».

Saca manifestó su desconcierto con las deportaciones porque «pensábamos que después de las elecciones (en Estados Unidos en noviembre) se iban a calmar sobre todo las redadas de indocumentados» que son deportados a sus paí­ses.

El mandatario manifestó inquietud por lo que pasará en septiembre de 2010, cuando expire el TPS que protege a unos 70.000 hondureños, 5.000 nicaragí¼enses y 230.000 salvadoreños, si para entonces no hay una reforma migratoria, ante lo que planteó pedir a Washington una prorroga a ese beneficio.