Ví­a libre a liberación de cinco rehenes de FARC


El gobierno colombiano autorizó a la ex senadora Piedad Córdoba a facilitar la liberación de cinco rehenes propuesta por la guerrilla de las FARC, después de que recientemente el Parlamento la expulsara de su banca acusándola de colaborar con ese ejército irregular comunista.


En un comunicado de cuatro puntos, el gobierno del presidente Juan Manuel Santos se declaró «dispuesto a garantizar todas las condiciones de seguridad», a la vez que autorizó a la ex senadora Piedad Córdoba para esa misión si la lleva adelante «con absoluta y total discreción».

Córdoba declaró su «satisfacción» por la «rápida» y «contundente» respuesta del gobierno, en declaraciones a la cadena de televisión multiestatal Telesur desde Buenos Aires.

La ex senadora además se comprometió a que el proceso para las liberaciones se haga dentro del «mayor sigilo, sin bulla, sin algarabí­a», dijo.

La guerrilla, que anunció las liberaciones el miércoles, aún no ha definido una fecha para entregar los rehenes.

Córdoba -destituida por el Congreso a principios de noviembre, luego de que la Procuradurí­a la sancionó con inhabilidad por 18 años al considerar que se habí­a extralimitado en sus anteriores mediaciones con las FARC, guerrilla con la que la acusó de tener nexos- estimó que ese proceso tomará al menos un mes.

«Yo le pongo más o menos un mes», dijo a la radioemisora Caracol desde Buenos Aires la ex senadora, quien desde 2008 ha facilitado la liberación de 14 rehenes de las FARC, varios de ellos con ayuda del presidente venezolano Hugo Chávez.

Córdoba explicó que el proceso de liberación dependerá de que Brasil brinde el apoyo logí­stico, como ha hecho en anteriores liberaciones de rehenes de las FARC.

«Todo tiene que ver con la posibilidad de que Brasil, que ha hecho últimamente todo el papel logí­stico, lo vuelva a hacer», señaló Córdoba. «No creo que haya ningún inconveniente», añadió.

Las comunistas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) anunciaron la liberación unilateral del mayor de policí­a Guillermo Solórzano, el cabo del Ejército Salí­n Sanmiguel, el infante de marina Henry López Martí­nez y los concejales Marcos Vaquero y Armando Acuña, secuestrados entre 2007 y 2010.

La más reciente liberación unilateral de las FARC ocurrió el pasado 30 de marzo, cuando entregaron al sargento Pablo Emilio Moncayo, secuestrado en 1997 y quien era uno de los rehenes más antiguos de esa guerrilla, que aún mantiene en su poder a un total de 19 uniformados.

La entrega de estos cinco rehenes fue presentada por las FARC como un «gesto de humanidad y desagravio» hacia Córdoba, luego de su destitución.

El gobierno de Santos, con cuatro meses en funciones, ha mantenido ante las FARC la lí­nea dura de su antecesor, el ex presidente Alvaro Uribe, y este jueves volvió a descartar cualquier posibilidad de intercambio de rehenes por guerrilleros presos.

«Canje humanitario no va a haber. En eso que no se equivoquen», dijo el ministro del Interior y Justicia, Germán Vargas.

Las FARC habí­an subrayado el miércoles que estas liberaciones no excluí­an la búsqueda de un canje de rehenes por guerrilleros presos, y mencionaron en particular a Simón Trinidad, encarcelado en Estados Unidos, donde fue condenado a 60 años por secuestro.

El gobierno de Santos asestó un duro golpe a las FARC en septiembre, cuando mató en un bombardeo al que era su número dos y jefe militar, Jorge Briceño o Mono Jojoy.

Santos fue ministro de la Defensa de Uribe, y desde ese despacho dirigió en 2008 el rescate de la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt, de nacionalidad colombiana y francesa, junto con tres estadounidenses y once militares y policí­as.

Las FARC, creadas en 1964, son la principal guerrilla de Colombia y contarí­an en la actualidad con entre 7.000 y 11.000 combatientes.