Venezuela permanece en alerta por liberación de rehenes de las FARC


Un familiar de los secuestrados por la guerrilla colombiana, enciende una veladora, para pedir por la reaparición de su pariente; muestra una imagen de Ingrid Betancourt mientras está en cautiverio.

Venezuela se mantení­a a la expectativa hoy por la anunciada liberación de tres rehenes de la guerrilla colombiana de las FARC, que podrí­a ocurrir este fin de semana en su territorio, para lo cual se encuentran ya en alerta los organismos de seguridad.


Clara Rojas -secuestrada hace casi 6 años y quien fue fórmula electoral de Ingrid Betancourt-, su hijo Emmanuel, nacido en cautiverio, y la ex congresista Consuelo González, deberí­an ser liberados según un comunicado de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia.

Una fuente cercana al gobierno señaló que «lo más probable es que la entrega ocurra este fin de semana en la zona sur de la frontera entre Colombia y Venezuela».

Probablemente los secuestrados «sean entregados a un emisario del presidente venezolano, que de inmediato los trasladarí­a a Caracas», agregó la fuente.

Las FARC, al anunciar que habí­an ordenado la liberación, señalaron que los rehenes serán entregados al presidente Chávez o a quien éste designe, pero aún se desconoce el lugar y la fecha en que serí­an liberados.

Los organismos policiales venezolanos están en alerta para brindar seguridad a los secuestrados, a quienes los traigan y a la senadora Córdoba, indicó una fuente de de inteligencia.

«Ya comenzó la movilización para el operativo», indicó la fuente, que no precisó cuántos funcionarios participan en éste.

«A medida que pasa el tiempo aumenta nuestra ansiedad por no saber qué pasa», dijo en Bogotá hoy Patricia Perdomo, hija de la ex legisladora Consuelo González.

Perdomo añadió que la familia de González, de 57 años y retenida hace seis, ultima los preparativos para el recibimiento, y que una prioridad será verificar su estado de salud. «Hemos estado averiguando dónde pueden atenderla, lo primero es saber cómo está», sostuvo.

Una situación parecida se vive en casa de Clara González, madre de Rojas, quien compró ropa para su nieto y un libro que obsequiará a su hija por los 44 años que cumplió ayer.

«Estoy a la espera de nuevas noticias y diligenciando un seguro médico para ella, que ojalá no lo necesite», señaló hoy.

Entretanto los dos principales rostros de la mediación que se desarrolló este año eran esperados en Caracas.

El presidente venezolano Hugo Chávez, quien fue mediador internacional de ese canje, se encuentra en Cuba, donde hoy inauguró la cumbre de Petrocaribe, y mañana tiene prevista una visita a la ciudad de Santiago.

Entretanto la senadora colombiana Piedad Córdoba, quien fungió como facilitadora de un canje humanitario, era esperada hoy al anochecer en Caracas, indicó Andrés Vázquez, uno de sus colaboradores.

Chávez y Córdoba mediaron durante casi tres meses en busca del canje de unos 45 rehenes de las FARC por 500 guerrilleros presos, hasta que el pasado 21 de noviembre el presidente ílvaro Uribe los suspendió de ese encargo.

Entre los rehenes canjeables de las FARC figuran Ingrid Betancourt, de nacionalidad colombiana y francesa, tres estadounidenses contratistas del Departamento de Estado, así­ como decenas de policí­as, militares y polí­ticos colombianos.

Las FARC enviaron hace unas semanas pruebas de vida de varios de los rehenes, entre ellos Ingrid Betancourt, que habí­an prometido a Chávez.

Las pruebas de vida fueron interceptadas por los servicios de inteligencia de Colombia, cuando tres enviados de la guerrilla se disponí­an a traerlas a Caracas pese a que ya Uribe habí­a suspendido la mediación del presidente venezolano.