El presidente í“scar Berger confirmó la llegada del Federal Bureau of Investigation (FBI), oficina de investigación de Estados Unidos, para colaborar con el proceso para establecer responsabilidades en el caso de los salvadoreños asesinados, entre ellos, tres diputados del Parlacen.
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De acuerdo con el Mandatario, la llegada de los investigadores será de forma inmediata; desconoce cuántos de ellos se harían presentes al país.
Explicó que su función será más dedicada a labores científicas. Se sabe, además, que en El Salvador existe una oficina regional del FBI, por lo que habrá colaboración estrecha con este caso.
Rosenthal: «Sería irresponsable»
Los cancilleres de Guatemala y El Salvador no descartan solicitar apoyo de expertos en investigación de otros países que ayude a esclarecer el crimen de tres diputados salvadoreños.
El ministro de Relaciones Exteriores Gert Rosenthal junto a su par de El Salvador Francisco Lainez, coincidieron en que si es necesario requerirán de expertos internacionales.
Hasta el momento ambos países no lo han hecho.
Rosenthal manifestó que no ve ningún problema en requerir investigadores de terceros países. «Si esto ayuda a esclarecer los hechos, no vemos ningún problema».
El canciller salvadoreño acotó que serán las instituciones de ambos países que están a cargo de la investigación las que deberán determinar si es necesario o no requerir de expertos de otras naciones.
Serán ellos los que indiquen cuándo y de qué manera necesitan algún tipo de colaboración que se necesita en la investigación.
Rosenthal menciona que las pesquisas se harán en «estrecha» consulta con el país vecino.
Ambos funcionarios ofrecieron una conferencia de prensa, en las instalaciones del ministerio de Relaciones Exteriores.
«No despertar el pasado»
El canciller guatemalteco manifestó que tendrá que esperar los resultados que arroje la investigación.
Ambos países están saliendo de un conflicto armado y se encuentran en la búsqueda de la recuperación de la confianza en las instituciones. «No hay que despertar los hechos del pasado, no queremos revivir un panorama tan doloroso», dijo el funcionario.
Rosenthal apuntó que en este momento es «una irresponsabilidad», calificar la muerte de los parlamentarios como un caso político. «En el fondo no sabemos lo que ocurrió, no hay que especular», expresó.
Sin embargo el presidente í“scar Berger dijo ayer que el crimen no fue casual. Antonio Saca, mandatario salvadoreño, expresó que el ataque pudo haber sido planificado.
El canciller se apoya en las declaraciones del ministro de Gobernación, Carlos Vielmann, quien menciona que la muerte de los parlamentarios no es hecho de la delincuencia común.