Culminando un corto período a cargo del Ministerio Público (MP), instancia a cargo de la persecución penal y blanco de fuertes críticas en cuanto a su efectividad, José Amílcar Velásquez Zárate, fiscal general saliente, es evaluado por diferentes analistas consultados por Diario La Hora.
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Diferentes representantes de la Sociedad Civil Organizada emitieron su opinión sobre la gestión de Velásquez Zárate, y su incidencia en la investigación de diferentes figuras delictivas. Algunos resaltan sus aciertos y otros sus errores.
Velásquez Zárate fue juramentado el 31 de julio de 2008 asumiendo así la dirección del MP en sustitución de Juan Luis Florido, quien dijo haber presentado su renuncia, sin embargo posteriormente se confirmó su destitución del cargo. El período que el aún fiscal general cubrió al frente de esa institución fue de un año y 10 meses.
Pero, ¿qué opinan algunos de los principales fiscalizadores del actual proceso de selección de la cabeza del MP sobre Velásquez?, ¿cuánta incidencia creen que haya tenido en determinado tipo de procesos?, ¿están de acuerdo con su reelección?
A continuación, algunos analistas y representantes de organizaciones fiscalizadoras de la labor del MP opinan sobre la gestión del Fiscal General y jefe de la instancia encargada de la persecución penal.
Aunque la redacción de Diario La Hora insistió en obtener los comentarios de Velásquez Zárate respecto a las críticas a continuación detalladas, el funcionario no respondió a las llamadas realizadas a su celular y oficina.
«No tiene una agenda política»
– ¿Cómo evalúa la gestión de Velásquez Zárate?
– Debemos partir de que el actual fiscal recibe un MP que prácticamente estaba secuestrado por intereses particulares, por lo tanto creo que hay que reconocer que ha hecho una labor en la dirección de profesionalizar al personal y quitar los intereses que aún existen en el MP. Además, asume esa instancia en la coyuntura en que la CICIG busca fortalecerla y hay apertura de este para que ello se concrete. Además la sociedad percibe que no tiene una agenda política o de ningún tipo, lo cual apoya la idea que su gestión ha sido una donde los poderes económicos, políticos y militares no han logrado manejar a la cabeza del MP.
– ¿Cree que incidió en la resolución de casos por muertes violentas?
– Velásquez encontró el MP con una estructura que no investigaba los hechos de violencia contra la vida, de hecho no había estructura: la fiscalía que tiene responsabilidad en los temas del derecho a la vida está desbordada por la violencia y el MP es insuficiente para dar respuesta al nivel de criminalidad y violencia; así que ha sido insuficiente el esfuerzo ante los niveles de violencia e impunidad que actualmente hay en Guatemala.
– ¿Estaría de acuerdo con su reelección?
– Hay dos elementos positivos en el Fiscal General: profesionalidad y continuidad; es importante dar oportunidades de planes de más largo plazo en esa instancia para que se siga fortaleciendo, con fondos, leyes; darle apoyo. Veo positivo que el fiscal sea de carrera del MP, y sea una persona que ha demostrado que los procesos pueden tener continuidad.
«Gestión buena, pero…»
-¿Cómo evalúa su gestión?
– Yo la calificaría como buena, pero con errores, con errores que le han restado mucho a su credibilidad al frente de la institución. Por ejemplo el proceso abierto contra ílvaro Matus, el cual entorpeció. Su reunión con el Presidente ílvaro Colom un día después de difundido el video grabado por Rodrigo Rosenberg también despertó dudas pero fueron disipadas ya que dejó la investigación en manos de la CICIG.
– ¿Cree que incidió en la resolución de casos por delitos concretos?
– Creo que a partir de que asumió el cargo hubo mayor atención y mayor coordinación con la Policía Nacional Civil y sobre todo en casos de asesinatos de pilotos, extorsiones y secuestros.
– ¿Estaría de acuerdo con su reelección?
– Pienso que habría que ver a los demás candidatos, pero sí reitero que generó mucha duda su intervención en el caso de Matus porque sí hubo una intervención directa y una obstaculización y eso es una falta delicada.
«Sigue habiendo retos grandes»
– ¿Cómo evalúa su gestión?
– Ha habido algunos pequeños avances pero siguen habiendo retos grandes que no se han logrado. El gran reto en ese sentido sigue siendo la lucha contra la impunidad, cómo reducir los niveles de impunidad tan altos: el MP cuenta con pocos investigadores para los 6 mil 400 procesos que se abren cada año; pero en el caso de su administración es importante entender que Velásquez es interino y hay que hacer un balance tomando eso en cuenta: siguen existiendo debilidades que la próxima administración debe asumir. Pero sin duda, Velásquez ha logrado coordinarse con la CICIG, ha impulsado la Ley de la Carrera Judicial, ha pedido que le asignen más recursos para la investigación e inició un proceso de depuración, sin embargo, infructuosa ha sido su gestión en la pelea contra la impunidad de delitos contra la vida; muertes de mujeres, trata de personas. La próxima administración necesita tener claro cuáles son los problemas por los que pasa el MP.
– ¿Cree que haya habido incidencia en la resolución de casos selectivos?
– Pese a que su gestión es sólo de año y medio y es un tiempo en que no se pueden hacer todos los años, existió un plan y siento que se priorizaron temas importantes como casos de corrupción y hubo interés en avanzar en temas de reestructuración, pero quedó en deuda grande en los casos de delitos contra la vida.
– ¿Estaría de acuerdo con su reelección?
– Hay que plantear que la sociedad civil impulsa un perfil de fiscal idóneo y quien sea electo para ese cargo debe cumplir con ese perfil. La fiscalización será pareja y no podría hacer esa valoración porque aún falta por ver.
«Actitud positiva»
– ¿Cómo evalúa su gestión?
– Es difícil evaluar un tanto por los resultados que ha arrojado esa institución, sin embargo, creo que fue notoria una actitud positiva de parte del fiscal delante de esa instancia. Obviamente a partir de las propias circunstancias diríamos que hay ciertos niveles de respuesta que son totalmente insuficientes ante los requerimientos del país en materia de investigación y persecución penal.
– ¿Cree que incidió en la investigación de casos por violaciones a derechos humanos?
– Para esos casos hay una total inamovilidad. Ha habido una negativa sistemática de poder desplegar realmente todos los esfuerzos que se necesitan como para empujar los procesos con seriedad y objetividad y con voluntad, de esclarecer los hechos, pero ahí inciden también las propias circunstancias y la historia de la institución que ha limitado esa posibilidad. No se observa ni voluntad ni trabajo en cuanto a los casos por genocidio.
– ¿Estaría de acuerdo con su reelección?
– Dentro del grupo de derechos humanos presentamos el perfil que debería de tenerse en cuenta para la elección del nuevo fiscal, de igual manera pensamos que se le garantice el derecho de participar como cualquier persona pero su actuación que de él se haga tendrá que decidir si queda o no, y claro que para esta elección en donde incluso podría participar él, quienes se postulen deben llenar esos requisitos y someterse al escrutinio público. Este proceso debería observar una transparencia total como lo demanda la sociedad guatemalteca.
«Hay una marcada diferencia»
– ¿Cómo evalúa su gestión?
– Hay que partir de un análisis del contexto en el que asume ese mandato. Ese contexto permite observar que termina el mandato de Juan Luis Florido, hay una marcada diferencia de quién debía terminar el mandato que era ineficiente y en relación al que realiza el actual fiscal general. Estimamos positivamente la gestión frente a Florido. Hay muchos elementos todavía dentro del MP que hace falta mejorar sustancialmente pero comprendemos que la gestión de Velásquez sólo tiene un año tres meses. Los grandes vacíos son: en materia de investigación criminal creo que las capacidades de las fiscalías son malas, otras fiscalías que tienen este tipo de problemática, hace falta una reestructuración para dar pasos encaminados en contra de la impunidad de delitos a violaciones de derechos humanos y el MP debe entender que eso podría constituirse en la columna vertebral para esclarecer los delitos del presente.
– ¿Cree que incidió en la resolución de casos por delitos económicos?
– No. Y pareciera ser que los fiscales tienen mucho temor a entrarle a lo que hoy se constituyen como los grandes evasores de impuestos en el país que no son más que los grandes poderosos de Guatemala; contrario a esta lógica se persigue con particular dureza y se criminaliza la protesta y la lucha de las comunidades y de las organizaciones sociales, para nuestra consideración estimamos que hay avance de la ineficacia y la ineptitud de Florido, pero de igual manera aun hacen falta muchos elementos qué cubrir como para pensar que la investigación sea la más fuerte garantía de la justicia.
– ¿Estaría de acuerdo con su reelección?
– No nos corresponde emitir un juicio en apoyar o no a un candidato particular, lo que marcamos es lo que consideramos como el perfil idóneo para elegir a las seis personas de las que el presidente tendrá que elegir al Fiscal General.