Cuatro vacas transgénicas capaces de dar leche para producir insulina humana nacieron en Argentina, en un hecho que se registra por primera vez en el mundo y que promete tener gran impacto para los enfermos de diabetes, reveló ayer una empresa privada de biotecnología.
Se trata de cuatro terneras de la raza Jersey, nacidas entre febrero y marzo de 2007, que poseen en su material genético el gen precursor de la insulina humana, precisó Andrés Bercovivh, gerente de desarrollo tecnológico del laboratorio.
Las terneras forman parte de la dinastía bautizada «Patagonia», el primer rodeo transgénico que se desarrolló en el tambo farmacéutico del laboratorio.
Allí se busca producir medicamentos de alta tecnología a un menor costo, indicaron los directivos de la firma en una rueda de prensa en la Sociedad Rural, el predio que cada año aloja la más tradicional exposición agropecuaria del país.
La producción local de la insulina a partir de la leche vacuna permitirá reducir «no menos que 30%» su costo en el mercado, dijo el director ejecutivo de la empresa, Marcelo Criscuolo.
Pero la leche que producirán estas vacas transgénicas es una etapa intermedia de la elaboración del medicamento, ya que se necesitará luego un proceso de aislamiento y purificación de la leche bovina a escala industrial.
No obstante, el volumen de producción de leche de unas 25 vacas será suficiente para cubrir la totalidad de insulina humana que demanda Argentina y que debe importar.
El país sudamericano tiene 1,5 millón de enfermos de diabetes de los cuales 300 mil son insulinodependientes, según el laboratorio.
Cerca de 200 millones de personas sufren de diabetes en el mundo, pero la cifra se duplicará en los próximos 15 años, con un mercado global de insulina que moviliza unos cinco mil millones de dólares, se indicó.
Se estima que en un plazo de tres años se obtendrá el primer macho transgénico con el gen de la insulina, lo que permitiría la expansión de la especie, precisó a la AFP Carlos Melo, gerente de Proyectos Especiales del laboratorio.
En el mismo lapso, se realizarán las exhaustivas pruebas de seguridad para cumplir con los requisitos regulatorios indispensables para la aprobación del producto.
A la espera de su crecimiento y su maduración, las terneras se encuentran alojadas bajo cuidados extremos en el tambo farmacéutico que la empresa posee en la localidad bonaerense de Baradero, 140 km al norte de Buenos Aires.
Los científicos destacaron que Argentina ofrece el «escenario adecuado y seguro» para el desarrollo de las vacas transgénicas, dado la ventaja comparativa del campo, con su experiencia y conocimiento adquirido en el sector ganadero.
La Unión Europea aprobó el año pasado la producción de insulina en base a la leche de cabras transgénicas, pero ésta es la primera obtención a partir de leche vacuna.
La empresa biotecnológica es la misma que presentó en 2002 a ’Pampa’, la primera ternera nacida por clonación de células somáticas fetales en Latinoamérica, con lo que Argentina es uno de los nueve países capaces de clonar vacunos en el mundo.
En octubre de 2003 ’Pampa Mansa’, una de las terneras transgénicas, comenzó a producir hormona de crecimiento humana en su leche y en enero de 2004 nacieron los primeros terneros, clones de un clon transgénico de América Latina, recordó el laboratorio.