El partido oficial admite de primera voz, del diputado Mario Taracena, presidente de la comisión de Finanzas y Moneda del Congreso de la República de Guatemala, que la esposa del Presidente mete las uñas en el Presupuesto.  Ahora estoy segura, que el Ejecutivo, está viviendo con desesperación, estos tiempos de solidaridad.  Mientras Guatemala, en una buena parte de su territorio, vive tiempos de angustia, al ver a sus seres queridos soterrados, a causa de la pésima construcción de carreteras y puentes, donde fueron contratadas empresas que violaron los códigos de construcción y ética.  Además de la deforestación que pasó su primera factura, porque el suelo reciente, sufre, las malas medidas tomadas por el Presidente y sus Ministros, en el tema de transgredir, infligir, contravenir, a los ambientalistas, que son doctos en la materia de la conservación de nuestro medio, sugerencias que han sido ignoradas por el Ejecutivo.  El Ejército, ha sido el indicado en todos los paí­ses del mundo, donde surgen desastres naturales, en salir los primeros en auxilio de sus hermanos en desgracia.  La Primera Dama, digna esposa del Presidente en funciones, tiene subyugado, humillado, vejado al Ejercito de Guatemala, haciéndole los mandados en la entrega de, las bolsitas sorpresa, que con nuestro dinero rellena para que en camiones del Ejercito en la zonas céntricas de la capital, entreguen a las señoras dueñas de salones de belleza, la ayuda de Cohesión Social, mismas bolsas que la dueña del salón de belleza, revenderá de inmediato a la tiendita del barrio.  Las escuelas primarias jamás fueron reconstruidas,  el ciclo escolar está presto a finalizar, sin maestros ni refacción.  Ahora, Joviel Acevedo, amenaza lo mismo, con otra huelga.  Por Dios, ya es suficiente que nos escupan la cara.  ¿Nos vamos a seguir quedando con los brazos cruzados?