La Unión Europea dio luz verde hoy a sanciones contra Irán por su programa nuclear, dejando sin embargo la puerta abierta para negociaciones, luego de que España y Gran Bretaña solucionasen el diferendo que los enfrentaba por el modo de mencionar a Gibraltar en ese documento y que bloqueaba la cuestión.
«Tanto España como el Reino Unido hemos alcanzado un acuerdo que permite desbloquear la situación, no sólo en este contencioso (de Irán), sino también en los otros reglamentos, como el de Corea del Norte y Somalia», anunció el lunes el secretario de Estado español para Asuntos Europeos, Alberto Navarro, representante de su país en una reunión de cancilleres de los 27 en Bruselas.
En efecto, tras el acuerdo hispano-británico por la sensible cuestión de las competencias de Gibraltar en el texto de las sanciones, la presidencia alemana de la UE confirmó hoy la adopción a nivel europeo de las medidas decididas por la ONU contra Irán por sus controvertidos programas nuclear y balístico.
Otras sanciones del mismo tipo, contra Corea del Norte tras el ensayo nuclear efectuado por ese país el pasado 9 de octubre, también estaban bloqueadas por ese diferendo y ahora podrán ser aplicadas.
El problema es que para aplicar este tipo de sanciones (prohibición de venta de tecnología sensible, congelación de fondos de responsables iraníes y norcoreanos en el extranjero) se necesitaba la firma de un documento jurídico que incluyese un anexo con una lista de autoridades, por ejemplo bancarias, que en cada país miembro supervisen el cumplimiento de esas medidas.
Gran Bretaña propuso en un primer momento incluir en esa lista a un alto funcionario del gobierno de Gibraltar, algo que fue rechazado por España, que pretendía que en ese lugar fuese mencionado un responsable británico, de modo de evitar cualquier precedente sobre las relaciones entre la UE y el Peñón.
«Lo que pedía España es que hubiera un solo punto de contacto, una sola autoridad competente. En este caso va a ser el Foreign Office (Cancillería) en el Reino Unido, y una vez que hemos solucionado ese problema, pues ya se ha desbloqueado este tema», explicó Navarro, al referirse al compromiso encontrado en negociaciones bilaterales el viernes pasado.
Gibraltar fue cedida a perpetuidad a Inglaterra por España a través del Tratado de Utrecht en 1713, pero Madrid reivindica la posesión, sólo prevista en caso en que Londres renuncie a la soberanía de este peñón de seis kilómetros cuadrados de extensión y 30 mil habitantes, ubicado en un extremo del territorio español.
La luz verde a las sanciones contra Teherán gracias a la solución del diferendo hispano-británico no significa de todos modos que la UE haya cerrado las puertas a las negociaciones con los iraníes para establecer una cooperación que garantice que no utilizarán la energía nuclear con fines militares.
«Queremos mantener la puerta abierta para negociar, pero Irán sabe lo que queremos de ellos», dijo en ese sentido el Alto Representante de la UE para la Política Exterior, Javier Solana, quien se reunió el fin de semana en Múnich con el principal negociación iraní Ari Larijani.
De su lado, la presidencia alemana de la UE recibió como una buena señal el discurso de Larijani el domingo ante la 43ª Conferencia sobre la Seguridad en Múnich sobre la predisposición de Irán de reanudar las negociaciones.
«Fue un discurso que demostró que Irán tiene interés en retornar y continuar con el proceso de negociaciones», dijo el ministro alemán de Relaciones Exteriores, Frank-Walter Steinmeier.