Con un campo pagado publicado hoy, el partido oficial nuevamente defiende el Gobierno de ílvaro Colom al indicar que se niegan sistemáticamente los avances del país y se da poco reconocimiento a los programas sociales, sin embargo, analistas señalan que la falta de transparencia es lo que invisibiliza estos.
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Una vez más se hace pública la inconformidad de la Unidad Nacional de la Esperanza, (UNE), sobre los comentarios no afines al Gobierno, en esta ocasión se indica que «hemos mantenido una actitud proactiva y de diálogo… sin embargo, también hemos tenido que enfrentar una oposición sistemática por parte de algunos actores que han perdido privilegios».
El campo pagado hace mención de que esta oposición sistemática no ha buscado únicamente oponerse a las iniciativas de Gobierno, sino también debilitar la institucionalidad del Estado.
«No es democrático establecer un clima de opinión pública en el que se nieguen sistemáticamente los avances del país y en el que se siembre la desconfianza. Hoy avocan al chavismo, como en 1954 utilizaron el discurso del comunismo para frenar la construcción de un mejor país, no se puede satanizar la gestión del presidente ílvaro Colom, cuando las políticas que ha impulsado se basan en la socialdemocracia», dice la UNE.
TRANSPARENCIA
Sin embargo, para analistas consultados, el problema fundamental es la falta de transparencia en los programas sociales, lo que ha sido ampliamente discutido.
Manfredo Marroquín, de Acción Ciudadana, explica que con este campo pagado la UNE toma una posición insensata, «nadie está oponiéndose al Gobierno por los programas sociales, son fantasmas que ellos están construyendo, lo que pasa es que existen demandas de mayor transparencia», señala.
Estas peticiones sobre la rendición de cuentas son válidas, indica el consultado, pues los programas se trabajan con fondos públicos, por lo que existe derecho a demandar, «pero no quiere decir que hay oposición», dice.
También Nery Rodenas, de la Oficina de los Derechos Humanos del Arzobispado, explica que el Gobierno ha sido criticado por la falta de transparencia y que los señalamientos publicados son confusos, pues se debe indicar quiénes son los que se oponen y dar mejores muestras de transparencia.
Además, sobre el tono confrontativo en que se redactan los campos pagados, Rodenas dice que «si se señalan cosas fuertes se deben presentar denuncias, el tono utilizado es una forma de presión hacia la población».
Por su parte, Marroquín define estas publicaciones como «falacias para defenderse y no llegar al fondo, los comunicados parecen boletines huelgueros, panfletos más que posiciones serias de un partido, simplistas, confrontativos y pobres en su análisis y lenguaje utilizado».