Una pareja presidencial desesperada


Hasta un niño entiende y aplica el lógico principio de las prioridades para planear y ejecutar su presupuesto. De patojos, más de alguna vez preferimos irnos a pie y no en camioneta, gastándonos en dulces o en cualquier otro gusto los cinco len que nos daba nuestro papá para ir al colegio todos los dí­as, pero nunca lo hicimos en época lluviosa. Ni caí­dos del tapanco que fuéramos. Cae por su propio peso que a la hora de gastar, no caben las incongruencias. ¿Entonces, cómo se le ocurre al gobierno de la República que dirige don ílvaro Colom gastar el pisto que tanta falta le hace para seguridad, salud o educación, en populistas viajes al puerto o en magdalenas y juguetes para los dí­as finales del año?

Francisco Cáceres Barrios

¿Que no sólo de pan vive el hombre? Es cosa muy cierta, pero en todo hay que usar el sentido común, ya que a la postre los que integran el gobierno salen más trasquilados, porque no teniendo nuestra gente ni un pelo de tonta, a quien le hayan regalado una pelota plástica para su chirí­s, termina tirándola mil veces al diablo, si a la hora de llevar a su madre moribunda a un hospital, no la atienden por falta de insumos. Cuestión de lógica y del más elemental razonamiento que sigue sin aplicarse. Otro asunto que no se puede dejar pasar por alto es que si tanta falta hace el dinero para emplearlo en la reconstrucción, que cada dí­a que pasa se acrecienta más su crisis, ¿por qué no combatir eficazmente a los contrabandistas que tienen inundado el mercado en todos los departamentos limí­trofes con la gasolina proveniente del México lindo y querido?

Para cualquiera con dos dedos de frente, si es que desea mantener el poder por cuatro años más, aunque fuera agarrado de las crines, es obligatorio tomar cualquier decisión basándose únicamente en la elemental lógica y, siendo la falta de seguridad ciudadana una de las mayoritarias quejas e insatisfacciones populares, ¿no es absurdo trasladar del Ministerio de Gobernación alrededor de Q657 millones de quetzales, de agosto del año pasado para esta fecha, hacia destinos que hasta el más ignorante sabe que van directo a financiar los programas que sigue manejando, con o sin nombramiento, la esposa del señor Presidente?

No es real la aparente preocupación porque las elecciones cuenten con el financiamiento debido o que el Renap funcione debidamente. El sólo decirle al Congreso, en donde se supone radica la soberaní­a del pueblo guatemalteco, «que el presupuesto del 2011 se aprueba o se aprueba» denota la gran desesperación por la que atraviesa la pareja presidencial al ver que tanto dinero empleado para engatusar a la población desde hace ya casi tres años no ha dado los resultados esperados, por lo que les urge seguir en las mismas el año entrante y… el que venga atrás que arree.