Un sueño roto… Un sueño hecho pedazos? Exactamente eso ocurrió a Lucia Bonato, una excelente persona a quien conocí por ser ella quien escribía artículos en italiano para las ediciones de la revista Travelers Top Tips; revista editada en cinco idiomas para el turismo que desafortunadamente tuvo que cerrar. Muchos sueños guatemaltecos se hacen añicos, por la gran indiferencia y el egoísmo que marca con fuego la innegable idiosincrasia chapina.
De esta aventura editorial nació una bella amistad con intercambio de múltiples facetas culturales. Lucia es una mujer que nació para estudiar y enseñar, además mantiene una honda preocupación por las personas que no tienen forma de culturizarse y cree, como creemos muchos, que a los pueblos se les debe enseñar a leer para que logren, a través del tiempo y del esfuerzo, algún grado de desarrollo integral, tanto individual como colectivo.
A raíz de eso, con su incansable empuje y creatividad, se acercó a muchas comunidades guatemaltecas que están desamparadas y desesperanzadas en muchos departamentos y municipios de Guatemala. A muchos lugares fue a enseñar, a motivar y a dar ideas para que hombres y mujeres bebieran de la actividad de su espíritu. Se acercó a la escuelita en Villalobos que ella menciona en su denuncia; con la Directora y las maestras por un lado y sus amistades por el otro, unieron esfuerzos y formaron una biblioteca para la escuelita.
Cuando volvió la última vez a Guatemala, encontró que después del cambio de Dirección, la biblioteca había sido mudada de lugar y los pocos libros estaban tirados, literalmente, sobre estantes y arrinconados, algunos, en el piso. Tengo fotografías de antes y después que documentan la denuncia y comprueban la condición de la biblioteca en el momento de su visita.
Dentro de los múltiples comentarios electrónicos al artículo anterior, aparece el nombre de quien aparentemente es el actual director, Carlos Ruiz, quien expresa lo siguiente «Invito a todas las personas a visitar nuestra escuela y ver la realidad, esta 100 veces mejor que hace dos años escribir es facil y mas de lejos.» (sic). Este comentario es bastante irreverente. La señora Bonato está lejos, pero ella es una persona sumamente honorable y las fotografías son más elocuentes que lo escrito por Ruiz: Las tengo en mi poder.
Es sumamente doloroso trabajar con buena fe y ad honórem durante tanto tiempo, con esfuerzo y tenacidad, para regresar y ver que el trabajo tan bellamente logrado tuvo un final tan triste… tan malagradecido.
Creo firmemente que el Ministerio de Educación tiene la obligación de sancionar a quienes hicieron semejante barbaridad contra la cultura de niños guatemaltecos. Se les debe sancionar, precisamente por poner en vergí¼enza a Guatemala ante el Cuerpo Diplomático radicado en este país. El Ministerio de Educación sabe quién, por ley, es el responsable de los bienes y servicios que contiene una escuela pública.
Así también, el Ministerio de Educación debe presentar excusas a la Embajada de Italia, debido al desagradecimiento y la torpe indiferencia contra la cultura de los niños guatemaltecos que estudian en esa escuelita desamparada radicada en Villalobos: la Escuela Oficial Rural Mixta de la colonia Villalobos.
Deben sentarse precedentes y la señora Bonato tuvo el valor de denunciar públicamente lo que fue realizado contra la biblioteca, sin personalizar o acusar directamente a alguien. Quedaremos en alerta.