La señora Rigoberta Menchú es dibujada sin zapatos por algunos caricaturistas. Lo que no refleja la realidad de ella, pues siempre usa zapatos. En comunidades muy pobres, la gente, y en especial los niños, ni para zapatos tienen; pero gracias a la penetración del calzado chino, muchos, aunque sea sandalias de hule, comienzan a ponerse. Siendo ella un ejemplo para miles de guatemaltecos, se le debiera dibujar con zapatos. Una Premio Nobel, empresaria, candidata a la Presidencia y primera mujer en aceptar este reto, merece una mejor caricatura. De repente hasta termina de convencer a muchos de ponerse por primera vez, un par de zapatos. O en sus zapatos. Por cierto, que lindos tienen los pies algunas jóvenes indígenas cuando se ponen zapatos de tacón.