Un dolor para los chinos


El chino Yao Ming, de los Houston Rockets, viajó a Estados Unidos con su esposa, que está embarazada, y a algunos de sus compatriotas le duele que el primer hijo del basquetbolista pueda adoptar la nacionalidad estadounidense, publicó la prensa del paí­s asiático de hoy.


Si el primogénito de la estrella de la NBA nace en Estados Unidos, tendrá automáticamente el pasaporte de ese paí­s, «una gran pérdida para el basquetbol chino» y «en lo que a los sentimientos respecta, será muy difí­cil para los aficionados aceptarlo», escribió el Chongqing Business Daily.

Ese medio de la comunicación se refirió con esos términos a los comentarios que recibió por Internet, sin embargo, en otra página web muy popular en China, sina.com, los usuarios de la red de redes apoyaron la idea de ver a un Yao americano.

«No convertirse en estadounidense es estúpido… China es un paraí­so para los cuadros, pero un infierno para la gente normal», apuntó una internauta llamada Limin.

Yao Ming y su mujer han estado en China durante varios meses, pues el pí­vot se encuentra recuperándose de una lesión que le obligó a abandonar la temporada en la liga estadounidense. Además, en su paí­s, el jugador se ocupó de entrenar al Shanghai Sharks, el antiguo club en el que jugó y que ahora posee.

El agente del basquetbolista, Zhang Mingji, dijo que el lugar del nacimiento del bebé, que se prevé entre los próximos meses de mayo y julio, es una cuestión «familiar» y no está sujeta a debate, según el diario de Chongqing.