Una destacada periodista y activista cívica fue brutalmente golpeada a las afueras de Kiev ayer, el más reciente en una serie de ataques contra activistas y miembros de la oposición en medio de semanas de protestas para pedir la renuncia del presidente Viktor Yanukovich y su Gabinete.
Cientos de periodistas y activistas de oposición se reunieron afuera de la sede del Ministerio del Interior en Kiev ayer para pedir la renuncia del ministro Vitali Zajarchenko por el ataque contra Tetyana Chernovil.
Algunos traían fotos de Chernovil, quien también ha sido una de las líderes de las manifestaciones multitudinarias que han sacudido a la capital ucraniana desde hace más de un mes, desde que Yanukovich decidió rechazar una alianza con la Unión Europea para forjar lazos más fuertes con Rusia.
Chernovil ha publicado para diversos medios noticiosos que favorecen a la oposición, entre ellos Ukrainska Pravda.
«¡Qué vergüenza! ¡Qué vergüenza!», gritaban los manifestantes, algunos de ellos con fotografías de Chernovil con el rostro amoratado, hinchado y golpeado.
Chernovil, de 34 años, fue atacada cuando iba conduciendo a casa. Fue acorralada por un vehículo deportivo y cuando trató de huir fue golpeada por varios hombres. La periodista presenta conmoción cerebral, y fracturas en nariz y rostro, dijo su esposo Mykola Berezovy.
El ataque ocurrió después de que Chernovil publicara un artículo sobre una elegante residencia que según ella fue construida para Zajarchenko.
Los manifestantes demandan la renuncia de Zajarchenko desde que hubo una violenta represión contra una pequeña marcha el mes pasado que dejó decenas de heridos. También acusan al ministro del Interior y al grupo cercano del presidente de usufructuar mientras los otros ucranianos padecen.
A Yanukovich lo acusan de apropiarse ilegalmente de una enorme finca en las afueras de Kiev y de construir un complejo palaciego en lo que los críticos consideran un ejemplo de corrupción. El presidente niega ser dueño de la finca y asegura que sólo ocupa una pequeña casa en su territorio.
El año pasado, Chernovil compitió sin éxito por un lugar de la oposición en el Parlamento.
En lo álgido de las elecciones de mediados de año, la periodista también irrumpió en el palacio presidencial en un intento por exponer la corrupción que hay ahí.