TRIUNFO FAMILIAR


Este era uno de los momentos más emotivos en la vida del estudiante Raúl Fuentes. En el dí­a de su graduación experimentaba sensaciones que una sola vez en la vida es posible disfrutarlas.

César Guzmán
cesarguzman@yahoo.com

Después de arduos años de labor y sacrificio, los compañeros de él recibí­an abrazos de familiares y amigos y, con los tí­tulos aún en sus manos, se marchaban en grupos a festejar el triunfo estudiantil.

Raúl se encontraba solo. Y, como preludio de las celebraciones por venir, encontró júbilo en las voces que lo invitaban a compartir. El se excusó y se dirigió al Hospital General para ver a su madre.

Doña Celia Fuentes, enferma después de muchos años de lavar ropa ajena y trabajar de noche, recibió el tí­tulo que su hijo emocionado le dedicaba y lloró de alegrí­a al saber que su esfuerzo no habí­a sido en vano.

UN HIJO AGRADECIDO ENDULZA EL SACRIFICIO MATERNAL