Pedro Infante Jr., quien falleció el pasado 1 de abril, recibió un homenaje en el legendario teatro Million Dollar de la ciudad de Los íngeles, California. La ceremonia, organizada por algunos de los hijos de Pedro Infante Torrentera, tuvo pocos asistentes. Al inicio había una veintena de personas, incluidos familiares, amigos y músicos, pero al parecer el público optó por aprovechar el asueto para dedicarlo a otras actividades.
Otro problema se debió a que la agenda del homenaje, que nunca se difundió entre el público, estaba integrada por desconocidos artistas locales y sólo al final del mismo cantaría la Sonora Santanera. En la primera parte de la ceremonia ni los propios hijos de éste, Pedro Infante III y Paulino, estuvieron presentes. Durante unos 40 minutos, la única hija presente fue Pamela Infante González, quien desde el escenario condujo un rosario y una plegaria.
En el escenario se colocó una fotografía de estudio de Pedro Infante Torrentera vestido de charro. Los restos del hijo primogénito del más grande ídolo de México, quien además de cantar, actuó en unas 250 películas, permanecen en el Servicio Forense, debido a una orden judicial y que aún esta pendiente una audiencia para el próximo martes, cuando un juez de Riverside determine sobre la demanda de la ex esposa Marisol Esparza.
Con respecto al funeral, la mujer que se casó en Estados Unidos con Pedro Infante Torrentera en el año 2000 y tiene una hija, exigió sus derechos de esposa para decidir en dónde debe ser sepultado, sin embargo Claudia González, otra mujer que se casó con el artista en México hace más de dos décadas asegura poseer los derechos para el destino de los restos. «Hemos decidido que después del martes nos lo llevemos por fin a Amealco, Querétaro a donde será sepultado, pues eso quería», dijo González.