El frecuentemente miembro olvidado de los «Tres grandes» de Miami, Chris Bosh, compensó las ausencias de LeBron James y Dwyane Wade para conseguir que el Heat lograra el domingo una gran victoria y se acercara a la posibilidad de asegurar la ventaja de jugar como locales durante los playoffs de la NBA.
Bosh anotó 23 puntos, incluido el triple de la victoria con 1,9 segundos por jugarse, para que el Heat de Miami venciera por 88-86 a los Spurs de San Antonio. James, Wade y Mario Chalmers debieron presenciar el partido desde los vestidores, lesionados.
«Somos los campeones defensores, no importa a quién pongamos ahí fuera», dijo Bosh. «Seguimos siendo el Heat de Miami. Creemos en nosotros mismos. Cada uno de estos chicos es un profesional. Jugamos grandes papeles en otras ciudades, pero nos unimos y aceptamos tener papeles menos protagónicos para ganar un campeonato aquí. Todavía podemos sacarle jugo a eso», añadió.
Ray Allen sumó 14 tantos, Norris Cole otros 13 y Mike Miller añadió 12 para Miami (58-15), que barrió la serie contra San Antonio (55-18).
Además de asegurar a su favor el criterio de desempate contra San Antonio, el Heat le sacó cuatro partidos de ventaja a los Spurs, con nueve por jugar, para mantener la mejor foja de la liga.
Miami venció a San Antonio 105-100 el 29 de noviembre, cuando los Spurs optaron por dejar descansar a Tim Duncan, Tony Parker, Manu Ginóbili y Danny Green. Todos menos Ginóbili (lesionado por tendón tenso de la corva derecha) jugaron el domingo.
Tim Duncan aportó 17 puntos y 12 rebotes, mientras que Kawhi Leonard embocó otros 17 tantos y recuperó 11 tableros para los Spurs, que vieron interrumpirse una racha de siete victorias en casa.
Green y Parker aportaron 12 tantos cada uno y Stephen Jackson otros 11. El brasileño Tiago Splitter encestó siete puntos, recuperó 10 tableros y repartió dos asistencias en 28 minutos en cancha para San Antonio.
«No hay duda, fue una victoria gratificante», dijo el entrenador de Miami, Erik Spoelstra. «Se trató de jugar contra un gran equipo, un equipo de élite. Hablamos de llegar con el orgullo de ser el Heat de Miami… Todos nuestros chicos han demostrado el orgullo de portar el nombre en la camiseta, en la parte delantera de la camiseta».
En Nueva York, Carmelo Anthony tuvo 24 puntos y 10 rebotes y los Knicks de Nueva York extendieron su racha ganadora a ocho partidos y el domingo dieron un paso más para quitar el título divisional a Boston al vencer a los Celtics 108-89.
Los Knicks vencieron a los Celtics por segunda vez en esta semana y ganaron la serie de temporada por primera vez desde 2003-04, cuando también se impusieron 3-1 ante Boston.
Cuando estaban por concretar su segunda victoria sobre los Celtics esta semana, el lesionado delantero Rasheed Wallace dibujó un número «50» enorme en el tablero de su vestuario, desafiando al equipo a luchar por una temporada de 50 victorias.
«Cincuenta victorias es siempre todo un reto por lograr en esta liga, ganar una división es siempre algo importante por lograr, un gran logro en esta liga. Así que dos cosas son definitivamente factibles. Simplemente tenemos que mantenernos en movimiento y lo haremos «, dijo Anthony.
Nueva York está nuevamente empatado con Indiana en la contienda por el segundo sitio en la Conferencia Oeste, que actualmente significa un encuentro de eliminatoria con los Celtics.
Jeff Green tuvo 27 puntos y Paul Pierce 24 puntos y 15 rebotes, mientras los Celtics vieron interrumpida su racha de dos partidos ganados. Boston ha ganado los últimos cinco títulos de la División del Atlántico desde que contrató a Kevin Garnett y Ray Allen en el verano de 2007.
Los Knicks no han ganado títulos divisionales desde la temporada 1993-94.
En otros resultados de la jornada: Nueva Orleáns 112, Cleveland 92; Washington 109, Toronto 92; y Chicago 95, Detroit 94.