Aproximadamente mil 725 de unos 3 mil mineros atrapados en una mina de oro en Sudáfrica fueron rescatados sanos y salvos hacia mediodía del jueves luego de permanecer varias horas atrapados a 2 km de profundidad.
Los mineros se habían encontrado atrapados a 2.150 m de profundidad cuando un cable de ascensor se rompió ayer hacia las 10:00 (2:00 a.m. en Guatemala) en la mina Elandsrand, situada cerca de Carletonville, unos 100 km al sureste de Johannesburgo.
A última hora de la mañana de hoy, unos mil 725 en total habían sido sacados a la superficie por pequeños grupos.
La dirección de la mina, propiedad del grupo Harmony Gold, el quinto mayor productor de oro del mundo, aseguró que todos serían socorridos.
«Estoy seguro de que el 100% saldrán de ahí sanos y salvos. Esta desgracia no es más que uno de los peligros del oficio», declaró Stan Bierschenk, director general de la mina.
Bierschenk hacía estas declaraciones mientras a pocos metros un grupo de 75 mineros emergía de un pozo, gracias a tres montacargas improvisados, cuyo trayecto hasta la superficie duraba unos 30 minutos. Este era el único medio de sacar a los mineros, por pequeños grupos. Más de 1.300 de sus colegas se encontraban todavía atrapados.
Los rescatados eran calurosamente acogidos por sus compañeros de trabajo que les estrechaban la mano y les daban de comer antes de que fuesen examinados por los servicios médicos.
Agotado y cubierto de polvo, Caswell Kabonga había pasado más de 24 horas atrapado. «Es una experiencia muy mala. Hace calor allí abajo. No hay agua. Tengo mucha hambre y mucha sed. Tengo la impresión de que podría comerme cualquier cosa», explica este joven de 24 años, empleado de la mina desde hace 18 meses.
Otro minero de 32 años, que se indentificó como Innocent, hablaba de la «enorme pesadilla». «No creía poder salir vivo. Nunca antes había vivido una prueba tal. Estoy tan cansado, tengo tanta hambre, tanta sed, tanta ira».
Patrice Motsepe, patrón de Harmony Gold, explicó que la seguridad de los mineros es la prioridad.
«Queremos evidentemente que todos salgan tan rápido como sea posible, pero si vamos más de prisa, corremos el riesgo de poner a nuestros empleados en peligro», declaró.
La ministra de Energía y de Minerales, Buyelwa Sonjica, se desplazó al lugar y debía reunirse con los responsables de la mina.
Los sindicatos señalaron por su parte que este accidente debe servir de alerta sobre las malas condiciones de seguridad en las minas.
«El sector del oro en general es muy negligente en cuanto a las cuestiones de seguridad», declaró a la AFP Peter Bailey, portavoz del Sindicato Nacional de Mineros.
Este sindicato hizo bajar al fondo a algunos de sus representantes para calmar a los mineros atrapados mientras esperan su turno para salir.