Un camión de carga pesada cayó en un barranco; la caí­da fue de más de 20 metros, lo que produjo una fuerte colisión. Sin embargo, sorprendentemente, ninguno de los tres que abordaban el autobús sufrieron consecuencias mortales.

Pablo Jorge del Cid Gudiel, de 65 años de edad, conducí­a el camión placas C 098BGB, en ruta a Chinautla, a la altura del kilómetro 12.5. Sin que aún se conozcan los motivos, el camión se salió del camino, y se internó dentro del barranco que está ubicado a la orilla de la carretera. Por más de 20 metros, el camión rodó, hasta que, afortunadamente, logró asiento, ya que, de haber seguido su curso, habrí­a ido a caer al rí­o que corre al final del barranco.

Junto a Del Cid Gudiel, también iban dentro del camión sus hijos Juan Pablo y José Asunción, de 16 y 23 años de edad, respectivamente.

Según testigos oculares del accidente, manifestaron que rápidamente un vehí­culo particular se detuvo y dio asistencia a los tres pasajeros, quienes evidenciaron tener golpes internos en distintas partes del cuerpo.

Este «samaritano» desconocido hizo que los tres accidentados abordaran su vehí­culos, para trasladarlos con rapidez al Hospital General San Juan de Dios, en la zona 1 de la ciudad capital.

El camión quedó prácticamente destrozado, por lo que los testimonios casi no dieron fe de que aún pudieran continuar con vida los tres tripulantes.

Los Bomberos Municipales acudieron al lugar un poco después, pero los heridos ya habí­an sido trasladados al centro asistencial, por lo que ellos se fueron hacia el mencionado Hospital General, para darles seguimiento asistencial a las ví­ctimas; esto no fue necesario, ya que llegaron aún con vida al nosocomio.

Sin embargo, el estado de Del Cid y de sus hijos es muy delicado, por lo que se espera que reaccionen de manera positiva en el transcurso de las horas.