Los fabricantes automovilísticos Toyota y General Motors (GM) libran una encarnizada batalla por el título de número uno mundial: el fabricante de automóviles japonés confirmó su primer lugar en ventas en el primer semestre de 2007, pero su rival estadounidense lo supera levemente en el segundo trimestre.
El grupo Toyota vendió 4,71 millones de ejemplares entre enero y junio en el mundo entero, sobrepasando así al gigante de Detroit (4,67 millones), según las cifras del fabricante de automóviles nipón publicadas hoy.
Toyota, que se beneficia de fuertes ventas en el extranjero, en particular en Estados Unidos, ya había arrebatado el primer lugar mundial a GM en el primer trimestre de 2007.
El japonés goza de una muy buena imagen de marca en América del Norte, y sus ahorradores modelos (entre ellos los híbridos) están más adecuados a la demanda del mercado que los automóviles estadounidenses muy gastadores de combustible.
Toyota corre también con la ventaja de la debilidad persistente del yen frente a las demás grandes divisas.
Las ventas del grupo -que incluye a Toyota, Hino y Daihatsu- progresaron cerca de 8% en el primer semestre.
La marca Toyota tuvo el mismo ritmo de progresión, y vendió 4,212 millones de unidades ella sola entre enero y junio.
En casa, la marca Daihatsu, especialista en pequeños coches, tiene el viento en popa, ya que muchos japoneses se orientan hacia este tipo de vehículos.
«Los consumidores tienen ahora la tendencia a comprar vehículos más pequeños, dejando de lado las pick-up y otros grandes coches», confirmó un analista de Tokai Tokyo Research, Mitsuyuki Odaira.
«Incluso fuera del continente americano y de Japón, donde ni GM ni Toyota se benefician de un apoyo patriótico, Toyota gana terreno mientras que GM alcanzó su tope, lo cual significa que la tendencia en favor de los modelos compactos progresa», agregó.
Mientras los fabricantes estadounidenses y europeos atraviesan dificultades, Toyota invierte fuertemente en el exterior del archipiélago para ajustar su gama a la demanda local, al tiempo que se apoya en tecnologías vanguardistas.
No obstante, GM, en plena fase de reconstrucción, está lejos de la derrota.
El estadounidense, aunque superado por Toyota en el conjunto del primer semestre, pasó ligeramente delante del grupo japonés para el periodo de abril a junio, con 2,41 millones de vehículos vendidos contra 2,37 millones para Toyota.
«GM sigue siendo el número uno en Estados Unidos, donde la marca conserva muchos simpatizantes», recordó un analista de Fitch Ratings, Tatsuya Mizuno.
Toyota lo sabe y mantiene una actitud prudente, evitando todo triunfalismo, como es su estilo.
«Leer en la prensa que somos el número uno corre el riesgo de hacer que nuestros empleados se descansen», se inquietaba recientemente un dirigente de Toyota.
El grupo tampoco está a salvo de dificultades temporarias.
Su método de producción, que elimina las reservas de piezas para ganar en eficacia, poder de reacción y competitividad, acaba de ser afectado por la escasez de piezas de un proveedor golpeado por el violento sismo del lunes en el centro de Japón.
Al igual que sus competidores japoneses, Toyota debió suspender la producción unos días, hasta que su proveedor de juntas, Riken, se recupere.
Las actividades de Riken se reiniciarían a comienzos de la semana próxima.
A pesar de este incidente, es altamente improbable, según los analistas, que GM logre evitar su degradación a un segundo lugar detrás de Toyota en el conjunto del año 2007.
El gigante japonés, cuyas ventas aumentaron en 6,9% en 2006 en un año, a 8,52 millones de unidades, espera franquear este año la barrera de los 9 millones y alcanzar la cifra de 9,34 millones de coches vendidos.