Tomas se degrada a tormenta


Tras el paso del huracán Tomas, el cielo quedó muy nublado en Puerto Prí­ncipe. FOTO LA HORA: AFP Logan ABASSI

El huracán Tomas se debilitó en las primeras horas de hoy a tormenta tropical al pasar sobre las Islas Turcos y Caicos luego de causar la muerte de seis personas en Haití­.


La lluvia y el viento continuaron castigando a Haití­ esporádicamente durante horas tras el paso de Tomas, y las inundaciones cortaron partes del paí­s mientras las autoridades advertí­an sobre riesgos de deslaves de tierra.

«Todas las partidas y llegadas en el aeropuerto Toussaint Louverture (en Puerto Prí­ncipe) están canceladas», señaló un comunicado oficial, añadiendo que en el transcurso de hoy se retomarí­an las actividades normales.

La ciudad sureña de Leogane quedó completamente bajo las aguas, dijo Philippe Joseph, un funcionario de Defensa Civil, y afirmó que en algunas partes de la localidad el agua llegaba a tres metros de altura.

«Vamos a tener más ví­ctimas debido a las inundaciones y los deslaves de tierra, pero todaví­a no podemos llegar a las comunidades más afectadas», dijo Joseph.

En Puerto Prí­ncipe, los haitianos estaban con el agua hasta los tobillos en algunos de los campos de desplazados que crecieron en la ciudad tras el devastador terremoto que mató a 250.000 personas en enero.

Pero los refugios de lona y chapa que cientos de miles de personas llaman hogar parecen haber resistido la tormenta mejor de lo previsto, gracias a los preparativos previos, que incluyeron el rápido cavado de zanjas de drenaje y las barreras hechas con bolsas de arena.

«Por suerte para ellos podemos decir que parecen haberlo superado», dijo Andrea Koppel, de la Cruz Roja de Estados Unidos en declaraciones a la cadena de televisión estadounidense CNN.

Sin embargo se registró la muerte de seis personas y el colapso de viviendas en muchas otras partes del paí­s. Dos de las ví­ctimas se produjeron en Leogane, otras dos en los poblados de Beaumont y León, cerca de la ciudad de Jeremie, y una quinta murió en el poblado de Anglais, según la prensa local.

Una sexta persona murió el jueves antes de la tormenta, en la localidad de Grande Anse, mientras trataba de cruzar un rí­o crecido en un coche.

Muchos poblados pequeños de Haití­ quedaron aislados luego de que la crecida de las aguas dañara los ya descuidados caminos en áreas rurales que eran difí­ciles de cruzar con buen tiempo.

El gobierno dijo que habí­a tomado medidas para acomodar a unas 100.000 personas en escuelas, iglesias y hospitales, una fracción de los 1,3 millones que quedaron sin techo tras el sismo de enero.

El Departamento de Estado norteamericano citó a Defensa Civil de Haití­ señalando que cerca de la mitad de la gente que vive en los campamentos de desplazados habí­a accedido a abandonar sus precarios asentamientos a favor de lugares más seguros.

El centro de Tomas estaba a 50 kilómetros en dirección norte-noroeste de la isla Gran Turco el sábado, informó el Centro Nacional de Huracanes (NHC) de Estados Unidos, con sede en Miami. La tormenta, con vientos máximos sostenidos de 110 km/h, avanzaba sobre las Islas Turcos y Caicos a 24 km/h.

El amplio frente de tormenta, sin embargo, seguí­a descargando lluvias sobre la isla de la Hispaniola, compartida por Haití­ y República Dominicana, partes de la cual recibieron hasta 25 centí­metros de lluvia, advirtió el NHC, con 38 centí­metros en algunos sitios aislados.

«Estas lluvias podrí­an causar lluvias repentinas y deslaves de tierra en terrenos montañosos», agregó el centro.

El paso de la tormenta amenazaba con agravar los daños en Haití­ al tiempo que este empobrecido paí­s lucha contra una creciente epidemia de cólera que ha causado 442 muertes.

Gran parte de los 10 millones de haitianos viven en condiciones precarias, siendo así­ vulnerables a los desastres naturales. Las laderas de las montañas han sido deforestadas para utilizar la madera de los árboles como combustible, incrementando el riesgo de aludes con el tiempo lluvioso.