Un tigre mató a un agricultor en la isla indonesia de Sumatra, ocasionando que aldeanos aterrorizados pidieran la muerte del animal, dijo hoy un funcionario, pero el felino es de un tipo tan poco común que está protegido por la ley.
Indonesia alberga aproximadamente a 400 tigres de Sumatra, los cuales están al borde de extinción debido a deforestación, caza ilegal y enfrentamientos con personas. El Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF por sus iniciales en inglés) dice que su cifra ha menguado a cerca de 400, de alrededor de 1.000 que existían en la década de 1970.
La mayor amenaza a la conservación es el conflicto con las comunidades humanas, según el reporte de 2009 del Ministerio de Ciencia Forestal. En promedio, de cinco a 10 tigres de Sumatra han sido muertos anualmente desde 1998, según el reporte.
Yudi Santoso, funcionario del Parque Nacional Batang Gadis, dijo que Karman Lubis, de 32 años, murió esta semana mientras trabajaba en una plantación de caucho cerca del parque ubicado en la provincia de Sumatra del Norte. Su cuerpo mutilado fue encontrado el martes a un kilómetro (menos de una milla) de la plantación.
Se sospecha que el mismo felino atacó a otras cinco personas.
Varios campesinos temerosos han pedido a las autoridades que maten al tigre a disparos, sin importar que lo proteja la ley. El gobierno local planea capturarlo y reubicarlo.
Se cree que el mismo tigre es responsable de ataques a otras cinco personas, así como a ganado en el último mes, en Jambi, otra provincia de la isla de Sumatra, dijo Nurazman Nurdin, un funcionario de la agencia provincial de conservación natural.
Un agricultor y cuatro trabajadores de plantación fueron hospitalizados con heridas por esos ataques, afirmó Nurdin.