Reos del Centro Preventivo para Varones de la zona 18 denunciaron este dí­a diversas amenazas de muerte que les han hecho compañeros de celda y señalan que todo se ha originado tras la renuncia de Alejandro Giammattei de la dirección de Presidios.

«Nos sentimos desprotegidos y temerosos por las amenazas que nos han hecho otros reos. Luego de la requisa que se hiciera en diciembre del año pasado, a nosotros nos trasladaron al sector 11 del preventivo de la zona 18; los otros compañeros creen que por estar cumpliendo condena queremos ejercer poder en el penal, pero eso no es cierto», expresaron los reclusos.

Los presidiarios cuentan que, hace unos dí­as, cinco hombres armados llegaron a la iglesia católica ubicada dentro del centro carcelario y los amenazaron; en esa ocasión les dijeron que no los asesinarí­an con cuchillos, sino con arma de fuego.

«De los que nos amenazaron logré identificar a dos, ellos son Emilio Moscoso y Otto Zea, quienes con palabras obscenas nos amenazaron», mencionó uno de los reos.

Según declaraciones de los internos, más de 15 reclusos son los que han sido amenazados por los que se consideran lí­deres dentro del preventivo.

Los privados de libertad han solicitado que se les brinde la protección necesaria por parte del Sistema Penitenciario así­ como de las fuerzas de seguridad pública.

Los internos reclaman el regreso de Alejandro Giammattei a la Dirección de Presidios, ya que aseguran que cuando él estaba al mando de las cárceles se ejercí­a mayor control y el tipo de amenazas que hoy sufren no se daban.

Cuentan algunos de los quejosos que Giammattei Falla era temido por los reos que ahora se sienten con todo el poder y control dentro del preventivo de la zona 18 y que han logrado ingresar armas blancas y de fuego.

Las autoridades del Sistema Penitenciario expresaron que harán las investigaciones respectivas para determinar la veracidad de los hechos que los reclusos han denunciado.

En los últimos meses del año pasado, la dirección general de los diversos centros carcelarios decidió realizar requisas sorpresivas en los penales, tanto en prisiones preventivas como aquellas de cumplimiento de condenas.

Luego de los operativos se tomaron decisiones como el traslado de reclusos hacia otras prisiones con el propósito de desarticular posibles bandas organizadas dentro de los centros de reclusión que extorsionaban y amenazaban a los guatemaltecos; otro de los objetivos era prevenir posibles motines liderados por reos que con el tiempo lograron ejercer control en los penales.

Ahora se puede observar en los del preventivo de la zona 18 a reos que ya fueron condenados por tribunal de sentencia, compartiendo celda con aquellos que están por dilucidar su situación jurí­dica.