Temporada de huracanes comienza con malos pronósticos


La temporada de huracanes en el Atlántico comenzará mañana y expertos norteamericanos advirtieron que será más activa que la del año pasado debido a la desaparición del fenómeno de «El niño», que protegió a la cuenca del azote de los ciclones.


Expertos estadounidenses de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) y de la Universidad estatal de Colorado, cuyos pronósticos son esperados todos los años por la comunidad cientí­fica, coincidieron en que, a diferencia de 2006, este año la actividad será superior al promedio, a pesar de que habí­an dicho lo mismo el año pasado.

La diferencia estriba en que en 2006 los cientí­ficos no esperaban la rápida formación de «El niño», un recalentamiento del Pací­fico que tiende a anular la actividad ciclónica en el Atlántico.

El fenómeno fortalece en el Atlántico vientos en la alta atmósfera que interrumpen la formación de tormentas.

Este año se espera que el fenómeno entre en su fase de enfriamiento, cuando se le conoce como «La niña» y anula la formación de esos vientos, creando un ambiente propicio para que los ciclones se formen.

Además, «las temperaturas en la superficie marí­tima del Atlántico norte y tropical permanecen muy por encima de sus promedios a largo plazo», y las aguas calientes son el combustible primario que alimenta a los ciclones, dijeron hoy Philip Klotzbach y William Gray, de la Universidad estatal de Colorado, en su último pronóstico antes del inicio de la temporada.

Klotzbach y Gray dijeron esperar durante la temporada «condiciones frí­as neutrales o débiles-moderadas de ’La niña’ «, y la formación de 17 tormentas, de ellas nueve huracanes, y de esos, cinco huracanes intensos, de categorí­a 3 ó más en la escala Saffir-Simpson, con un máximo de 5.

La NOAA, por su parte, pronosticó hace poco más de una semana la formación de 13 a 17 tormentas tropicales, 7-10 huracanes y 3-5 huracanes intensos.

Esos números están muy sobre el promedio histórico de 1950 a 2000, perí­odo durante el cual se han registrado casi 10 tormentas al año, seis huracanes y dos huracanes intensos.

«Hay alguna incertidumbre en torno a si ’La niña’ se formará o no, y si lo hace cuán fuerte será», dijo Gerry Bell, meteorólogo del Centro de Pronósticos de la NOAA.

«’La niña’ podrí­a formarse en uno o tres meses. Si ’La niña’ se forma, la actividad ciclónica posiblemente estará en el rango más alto de lo pronosticado, o aun más alto si ’La niña’ se fortalece», dijo Bell.

Agregó que aún si el fenómeno no se formara, como se está en una era de alta actividad ciclónica que podrí­a durar hasta 40 años, las condiciones están dadas para una temporada «sobre lo normal».

La actividad ciclónica en toda la cuenca atlántica será de 185% sobre el promedio histórico y las probabilidades de que un huracán impacte Estados Unidos serán de 140% sobre el promedio.

La naturaleza dio un respiro a la región el año pasado, cuando la mayorí­a de los cinco huracanes que se formaron se quedaron sobre el océano, tras dos años de intensa actividad.

En 2005 se rompieron todos los récords cuando se formaron un total de 28 tormentas, de ellas 15 huracanes, entre los cuales los mortí­feros «Stan» (unos 2.000 muertos en Guatemala) y «Katrina» (unos 1.500 muertos en Estados Unidos).