Gran Bretaña se prepara hoy para más tormentas, lo que aumenta los temores sobre la situación sanitaria en las zonas afectadas por las inundaciones, las peores en la historia moderna de este país.
La Agencia de Protección de la Salud señaló que el riesgo de contraer una enfermedad es generalmente bajo, pero advirtió a las poblaciones de la zonas afectadas por los desbordamientos de los ríos que no entren en contacto con el agua estancada, para evitar contaminaciones.
Mientras tanto, más de 340.000 personas siguen sin agua potable en Gloucestershire (Oeste), el área más golpeada por los desbordamientos, donde restaurar los servicios de agua podría tomar dos semanas, lo que también plantea riesgos para la salud de la población.
Los servicios de bomberos de Gloucestershire indicaron que dos personas murieron tratando de bombear agua del sótano de un club de rugy en Tewkesbury, una pequeña ciudad inglesa convertida ahora en una isla a causa de los desbordamientos.
Por falta de electricidad, las víctimas estaban utilizado una bomba que funcionaba con petróleo, y al parecer murieron a causa de los gases, indicó el jefe de los bomberos, Terry Standing.
Aunque las aguas del Támesis han comenzado lentamente a bajar en algunas áreas, la Agencia del Medio Ambiente decretó este jueves siete alertas de inundaciones, mientras 18 localidades están en observación en toda la región regada por ese río.
Los temores de más inundaciones del Támesis en Oxfordshire y Berkshire (centro) se aminoraron luego de que los niveles del agua parecieron haberse estabilizado durante la noche del miércoles, indicó la Agencia, que llamó a la población a mantenerse alerta, en previsión de más tormentas el jueves.
Mientras, el servicio meteorológico británico indicó que la pluviometría en el trimestre de mayo a julio es la más importante de su historia inundaciones, aunque este último mes todavía no ha terminado.
Inglaterra y el País de Gales recibieron 387,6 milímetros de lluvia desde el mes de mayo, lo que representa un récord para este período de tres meses desde que comenzaron a efectuarse estadísticas, en 1766, indicó la Oficina Meteorológica en un comunicado.
El récord anterior era de 1789, cuando cayeron 349,1 milímetros de agua. El promedio de pluviosidad entre 1971 y 2000 fue de 186,3 milímetros.
En junio, las inundaciones en el norte causaron la muerte de cuatro personas. El oeste y el centro de Inglaterra sufren desde hace casi una semana las peores inundaciones del país en 60 años.