«Se avecinan nuevas modalidades, nuevas intenciones del Gobierno. No cabe duda que son buenas, pero esperamos que sean técnicamente estudiadas, porque quieren poner institutos oficiales donde ya hay un básico por cooperativa, y esto va a perjudicar».
lahora@lahora.com.gt
Así manifestó su preocupación Otto Nery Alvarado Díaz, presidente de la Junta Directiva Nacional de Institutos por Cooperativa, representación nacida en 1972 cubriendo todo el territorio nacional, con una serie de limitaciones por no contar con suficiente apoyo del Ministerio de Educación.
Lo anterior contrasta con la independencia de poderes, ya que desde el Congreso se podría hacer reflexionar al Organismo Ejecutivo para que no se afecte el plan tripartito del cooperativismo, cuando el Estado tiene la facultad de ampliar la cobertura y no se puede considerar como competencia.
Asimismo los procesos educativos que funcionan a la par del sistema oficial pueden seguir funcionando mantener su estructura y entra a reforzar al Estado en los esfuerzos para aumentar el nivel educativo y la cantidad de jóvenes preparados a nivel básico.
«Horizontal y verticalmente es más grande el cooperativismo que los institutos básicos oficiales, que no han vuelto a nacer, ahora son mil ciento once institutos que atienden a 149 mil estudiantes en todo el territorio nacional», aseguró Alvarado Díaz.
ESFUERZOS
Según los cooperativistas, le han quitado una responsabilidad al Estado que tiene la obligación de brindar educación, pues funcionan todo el año sólo con un subsidio de Q15 millones que representan aproximadamente Q24 mil 202 por sección.
Las municipalidades otorgan una ayuda únicamente de acuerdo a la conciencia social de cada Concejo municipal que tiene claro que la educación es la alternativa para lograr cambios y desarrollo en las comunidades.
Los padres de familia pagan una cantidad simbólica de entre Q20 y Q30 mensuales para poder cubrir prestaciones laborales a un número superior a doce mil maestros.
TEMOR
«Según los reglamentos que existen, tiene que estar por lo menos a cinco kilómetros cada uno de los establecimientos para que no nos perjudiquemos, porque sería tirar esfuerzos si nos ponen un instituto oficial donde va a haber gratuidad y nosotros que tenemos tantos años de estar cobrando una simbólica cantidad nos van a quitar alumnos y eso va a ser un problema», expresaron los maestros cooperativistas.
Profesionalización e infraestructura
La universidad Galileo en Quetzaltenango está especializando a doscientos cincuenta catedráticos en lenguaje y comunicación; matemática y física; química y biología; área social y área de computación, promoción que está pagando un costo simbólico de cien quetzales mensuales, se informó.
La educación por cooperativa funciona durante las tardes utilizando la infraestructura escolar primaria de los municipios que funcionan durante las mañanas, pero con problemas porque en la mayoría de casos la carencia está en falta de mobiliario y equipo, aseguraron.