Don Gustavo Porras del Siglo XXI, el enfoque que hace sobre las maras, los tatuajes y la criminalidad tienen cierta profundidad periodística. Creo que aquí no existen estudios de expertos que hayan analizado la situación de Seguridad Pública y la Justicia Penal, ni en el Estado ni en otras esferas de expertos o estudiosos. Aquí se dan linchamientos a los presuntos delincuentes catalogados simplemente porque las personas tienen tatuajes. En todas las esferas se ve sólo preocupación; pero no resultados eficaces para enfrentar los problemas. Hay indiferencia e inacción institucional. No es un buen camino las soluciones antihumanas como las ejecuciones sumarias, extralegales o extrajudiciales, pues el cáncer de la criminalidad no se elimina así.