Tales de Mileto, o el primer filósofo


Luis_Enrique_Prez_nueva

Los primeros filósofos distinguieron entre ser y modo de ser; y observaron que había dos clases de cambio: cambio de modo de ser, y cambio del ser mismo. Una roca, por ejemplo, puede estar fría en determinado momento, y caliente en otro determinado momento; pero es evidente que ese cambio no es cambio de la roca misma, sino cambio de un modo de ser, que consiste en un cambio de temperatura. La roca permanece.

Luis Enrique Pérez


Empero, también puede cambiar la roca misma. Por ejemplo, si la roca se destruye, cambia la roca misma porque ya no es roca. La roca no permanece. Ese cambio puede ser interpretado de esta manera: la destrucción de la roca es un cambio de modo de ser de un ser que no es roca. Por ejemplo, esa destrucción puede consistir en un cambio de modo de ser de los elementos químicos de los cuales está compuesta. Esos elementos permanecen; y cada uno de ellos puede ser, a su vez, un modo de ser de una sustancia química única. Los primeros filósofos creían que tenía que haber un ser que ya no fuese modo de ser de otro ser, sino tenía que ser el ser primero, es decir, irreductible a un modo de ser.
   
    Hace aproximadamente seis siglos antes de la Era Cristiana, el filósofo Tales conjeturó que el ser primero, del cual, por consiguiente, todos los otros seres son un modo de ser, es el agua. Tales nació probablemente en el año 624, en Mileto, que era una de las principales ciudades de Jonia, como también lo eran Samos, Éfeso, Colofón y Quío. A su vez, Jonia era una comarca del Asia Menor.
   
    Tales fue, durante su juventud, un próspero y viajero mercader. Durante su vejez estuvo en Egipto, en donde midió la altura de las pirámides en función de la sombra que proyectaban. Predijo el eclipse que, con base en el calendario gregoriano aplicado retrospectivamente, aconteció el 22 de mayo del año 585, antes de la Era Cristiana. Demostró dos teoremas geométricos. El primero afirma que dos ángulos opuestos que tienen el mismo vértice, son iguales. El segundo afirma que si dos lados de un triángulo son iguales, también son iguales los ángulos opuestos a esos lados.
    Tales ha sido considerado el padre de la matemática griega. Probablemente descubrió dos importantes fenómenos físicos: el magnetismo y la electricidad. En la historia de la filosofía, suele ser declarado el primer filósofo.
   
    ¿Por qué habría conjeturado Tales que el agua era el ser primero, es decir, el ser del cual todos los otros seres son un modo de ser? Su conjetura quizá parezca ingenua, porque sabemos que el agua es una sustancia compuesta y, por consiguiente, es un modo de ser de los elementos químicos que la componen. Al respecto, tenemos que recordar que Tales no disponía de complejos instrumentos de investigación científica; y la ciencia comenzaba a surgir, gracias precisamente a él.
   
    Aristóteles, en su obra “Metafísica”, propuso esta explicación: «Tales pensó que el agua era el principio de los seres probablemente porque observó que el agua es alimento de todas las cosas, que hasta lo caliente procede de ella y que todo animal vive de la humedad.» Además, «las semillas de todas las cosas poseen una naturaleza húmeda, y el agua es precisamente la causa de la humedad de las cosas.»
   
    Post scriptum. Federico Nietzsche, en su obra “La filosofía en la época trágica de los griegos”, afirma que la concepción de Tales es valiosa por tres razones: primera, es sobre el origen de las cosas; segunda, intenta ser racional y no mitológica; y tercera, “en ella está contenido, aunque en estado incipiente, el pensamiento de que todo es uno”.