Los Chiefs de Kansas City se decían una y otra vez que el partido no había terminado, sin importar que Philip Rivers dirigía una ofensiva con menos de un minuto en el reloj y que Nick Novak se alistaba para patear el gol de campo de la victoria de San Diego.
Los Chiefs han estado contra la pared tantas veces en la temporada que con toda seguridad no se iban a rendir.
Con el primer down en la 15 de Kansas City, Rivers pidió el balón, pero nunca le llegó a las manos. Se fue botando suelto por el terreno, botó bajo el apilamiento y finalmente surgió en las manos del linebacker Andy Studebaker de los Chiefs, que corrió feliz hacia la banda.
El partido ingresó al tiempo extra, y Ryan Succop acertó un gol de campo de 30 yardas que le dio el lunes a los Chiefs un dramático triunfo por 23-20 sobre los Chargers.
«Nuestros muchachos decían: ‘esto no termina sino hasta que acaba. Ha seguir jugando, y profundizando»’, recordó el coach de los Chiefs, Todd Haley. «Nunca se sabe qué va a ocurrir».
Kansas City (4-3) se erigió en el primer equipo en la historia de la NFL que pierde los tres primeros encuentros y llega a compartir al menos en parte el liderato de una división al cabo de los cuatro siguientes. Los Chiefs son también el primer equipo desde los Steeler de Pittsburgh en el 2000 que gana cuatro juegos consecutivos después de perder los tres primeros.
Rivers pudo haber evitado que todo eso sucediera.
«No he tenido uno en años», dijo Rivers sobre el balón perdido con el centro. «Fue desafortunado. Lo perdí. … Salió mal en una jugada que nunca debió haber ocurrido».
Kansas City tuvo la oportunidad de ganar el partido en el tiempo regular, pero Matt Cassel lanzó por encima de su receptor en territorio de los Chargers, y la segunda intercepción de Eric Weddle forzó el tiempo de prórroga.
San Diego ganó el lanzamiento de la moneda, pero no pudo conseguir un primer down, y Cassel dirigió tranquilamente a Kansas City por el terreno. El gol de campo de Succop con 5:16 en el reloj le entregó a los Chiefs su cuarta victoria en fila y los encaramó a un empate en la división con San Diego (4-3) y los Raiders de Oakland (4-3).