Sondeos dan favoritos a demócratas


Anuncio. El senador republicano George Allen realiza un anuncio de su campaña para la reelección.

La batalla por el control del Congreso estadounidense entró hoy en la recta final cuando otro sondeo mostró que los demócratas probablemente se beneficien del descontento de los votantes con la guerra en Irak.


Intentando revertir la situación, el presidente George W. Bush y otros lí­deres republicanos aprovechan un tropiezo del senador demócrata John Kerry.

El ex candidato presidencial demócrata habí­a dicho ante un grupo de estudiantes que «hay que aprovechar al máximo los estudios, estudiar mucho, hacer las tareas, hacer un esfuerzo para desenvolverse. Si no, terminarán en Irak».

Inquietos por la posibilidad de que esa intervención pudiera restarle votos a los demócratas, otros miembros del partido le sugirieron el miércoles a Kerry que se disculpara y se abstuviera de intervenir en la campaña.

De todos modos, una nueva encuesta sobre intenciones de voto divulgada el jueves mostró que la mayorí­a de los votantes sigue oponiéndose a la forma como el gobierno de Bush está conduciendo la guerra de Irak y respaldando a los demócratas en su intento por recuperar el control del Congreso.

El último sondeo de The New York Times/CBS News antes de los comicios del martes muestra que sólo el 29% de los electores estadounidenses aprueba la forma en que Bush conduce la guerra, igualando así­ su nivel más bajo de popularidad vinculada al conflicto de mayo y junio últimos.

A pesar de que su encuesta nacional no proporciona datos especí­ficos por distritos ni sobre las carreras al Senado y la Cámara de Representantes, el Times dice que el 52% de los electores registrados consultados votarí­a por los demócratas, contra sólo 33% por los republicanos.

Entre los votantes independientes, considerados clave para los resultados globales, 50% dice que apoyará a los demócratas, contra 23% que votará por los republicanos.

Aunque Bush no es candidato, se cree que su tasa de aprobación global de 34% refuerza la idea de que los republicanos podrí­an sufrir el martes un severo revés.

Ese 34% de aprobación es nueve puntos inferior al que tení­a el predecesor de Bush, Bill Clinton, en octubre de 1994, cuando los republicanos tomaron el control del Congreso.

El sondeo de Times/CBS arroja aproximadamente el mismo resultado que una encuesta de The Wall Street Journal/NBC divulgada el miércoles. Según esta última, el 52% de los votantes registrados votarí­a a los demócratas, contra 37 que prefiere a los republicanos.

El sondeo indica que 54% de los electores dijo que no valió la pena el precio humano y económico que se pagó por el derrocamiento del dictador iraquí­ Saddam Hussein.

Ambas encuestas, sin embargo, fueron realizadas antes de las declaraciones de Kerry, por lo que nadie puede afirmar con certeza qué impacto pudieron tener sobre los electores.

Los demócratas se proponen recuperar el control de la Cámara de Representantes y del Senado. Para ello necesitan lograr 15 bancas más de las que ya tienen en la Cámara de Representantes y seis de las 33 que están en juego en el Senado.

Una victoria demócrata en ambas cámaras podrí­a afectar los dos últimos años del mandato de Bush, pero también podrí­a paralizar al Congreso, según analistas.

Aunque las encuestas nacionales sugieren que el involucramiento de Estados Unidos en Irak es el principal tema de la campaña, The Washington Post informó el jueves que al menos 15 bancas republicanas en la Cámara de Representantes estaban en peligro debido a una serie de escándalos, incluyendo los casos del lobista republicano Jack Abramoff y el de abusos sexuales que involucró al representante Mark Foley.