Ahora que Curiosity pasó sin problema su examen de desplazamiento en Marte, la sonda de la NASA apunta la mira a travesías más largas.
El primer recorrido de prueba alrededor del aguijarrado cráter donde aterrizó fue solamente eso — una prueba. La sonda avanzó unos cinco metros, rotó en ángulo recto y retrocedió una corta distancia, dejando huellas en el suelo rojizo.
Jefes de misión se mostraron extasiados el miércoles por la falta de incidentes en el recorrido inicial de la sonda de 2,5 millones de dólares. En varios días, Curiosity se apresta a avanzar más para tratar de determinar si el ambiente del planeta alguna vez albergó vida.
«No pudiera haber sido más importante», dijo el administrador del proyecto Peter Theisinger en el Laboratorio a Propulsión a Chorro. «Nosotros construimos la sonda. Así que a menos que la sonda ruede, realmente no hemos conseguido nada … Es un gran momento».
El corto viaje se produjo un día después de que Curiosity moviese sus ruedas exitosamente para probar su capacidad de maniobra.
El Curiosity se posó en el Cráter Gale cerca del ecuador marciano el 5 de agosto. El sitio ha sido nombrado en honor al difunto escritor de ciencia ficción Ray Bradbury, autor de las «Crónicas Marcianas».
Su destino final es el Monte Sharp, una montaña enorme que se asoma al ancestral fondo del cráter, proveyendo un punto de partida para la búsqueda de vida en Marte.