El jefe de la diplomacia de la Unión Europea, Javier Solana se reunió el viernes en Londres con el negociador iraní, Said Jalili, para reclamarle la suspensión del enriquecimiento de uranio, pero la intransigencia de Irán deja pocas esperanzas de evitar nuevas sanciones.
En la reunión, que se celebra en Lancaster House, Solana tratará una vez más de convencer a Teherán de que acepte suspender su programa de enriquecimiento de uranio, que Occidente sospecha alimenta un programa secreto de fabricación de la bomba atómica.
El diplomático europeo, que debe entregar en unos días un informe muy esperado sobre la cooperación de Irán, y Jalili, empezaron sus discusiones hacia las 10h00 GMT, tras un apretón de manos pero sin hacer comentarios.
«Vamos a presentar nuevas ideas a Solana», declaró a la AFP un miembro de la delegación iraní, a su llegada a Lancaster House. «Estamos optimistas», agregó el delegado iraní, antes de entrar a la reunión.
En la reunión, el Alto Representante de la Unión Europea para la Política Exterior reiterará su ofrecimiento a Irán de abrir negociaciones sobre un amplio plan de cooperación económica y política, a cambio de la suspensión de su controvertido programa de enriquecimiento de uranio.
Esta es la primera vez que el diplomático europeo, que se encuentra de forma regular con los iraníes desde junio de 2006, se reúne con Jalili en ausencia del ex responsable del programa nuclear iraní, Ali Larijani.
La portavoz de Solana, Cristina Gallach, explicó que el jefe de la diplomacia europea había venido a la reunión de Londres con un espíritu abierto «pero sin ninguna propuesta nueva».
Solana «está aquí para escuchar a Jalili y ver qué proponen los iraníes», comentó la vocero, que dijo que probablemente habrá una declaración conjunta esta tarde.
El diplomático europeo informará este viernes, o temprano el sábado, los resultados de la reunión al grupo de seis potencias (Estados Unidos, Rusia, China, Francia, Gran Bretaña y Alemania) que manejan la cuestión en el Consejo de Seguridad de la ONU, indicó la vocero.
Pero la instransigencia de Irán sobre la suspensión de ese programa sugiere que la reunión no logrará avances que permitan evitar nuevas sanciones contra Teherán.
«La suspensión pertenece al pasado y no está en el orden del día» de la reunión en Londres, afirmó hace unos días el portavoz del gobierno iraní, Gholam Hossein Elbam.
Según Occidente, los iraníes están tratando de aprovechar las divergencias entre los Seis sobre nuevas sanciones, que son reclamadas por Estados Unidos pero que no cuentan con el apoyo de Rusia y China.
El pasado 28 de septiembre, los Seis llegaron a un compromiso para esperar hasta fines de noviembre antes de proponer sanciones reforzadas contra Teherán en la ONU.
Asimismo, el sábado se celebrará en París una reunión sobre el programa nuclear iraní, en la que participarán altos responsables de las seis grandes potencias, en la que participará un representante de Solana.
La reunión aspira a hacer un balance sobre el tema nuclear iraní y definir la continuación que se dará en el Consejo de Seguridad de la ONU, a los informes solicitados a Solana y al director general de la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA), Mohamed ElBaradei, sobre sus conversaciones con Irán, declaró el ministerio francés de Relaciones Exteriores.