Sistema Penitenciario: “Pavoncito es un ejemplo”


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Luis González, director del Sistema Penitenciario, en entrevista con La Hora, explica su percepción sobre la situación de las cárceles, en las que reconoce que existen distintos niveles de corrupción y serios problemas, como el hacinamiento y la falta de una clasificación de privados de libertad.

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POR MARIELA CASTAÑÓN
mcastanon@lahora.com.gt

El funcionario también resaltó la situación de Pavoncito, que a su criterio es un centro carcelario ejemplar en cuanto a rehabilitación de los internos y aseguró que el capitán Byron Lima, es un ejemplo de liderazgo positivo.

¿Qué avances puede mencionar, sobre su trabajo en el Sistema Penitenciario?
Dentro del trabajo de diagnóstico que se ha hecho, se ha visitado un 95 por ciento de los centros de detención carcelarios y se pudo detectar una infraestructura totalmente colapsada. Dentro del diagnóstico también pudimos ver que en tecnología estamos a cero, y también se pudo detectar que derivado de esos problemas de hacinamiento, pues lógico, hay ciertos grados de corrupción. Es de su conocimiento, una corrupción de estructuras que se manejan y que extorsionan desde lo interno hacia lo externo, y sobre esto se está trabajando bastante arduo. También se pudo detectar que derivado de esa infraestructura colapsada, de ese hacinamiento, es bastante difícil tener una clasificación eficaz, entiéndase que ahorita no estamos en la capacidad de tener a todos los que están en situación de condena en centros de detención de condena y todos los que están en situación preventiva, que estén en los centros de detención preventiva. Únicamente ahorita que usted me pregunta, hay dos centros que sí tenemos solo en situación de condena y para lo que fue hecho es el Centro de Orientación Femenina (COF) y la Granja de Pavón, que sí están con solo personal en situación de condena, pero totalmente hacinados.

De los 22 centros estamos llegando a un 107 por ciento de hacinamiento. Quiero decirle que se tiene una capacidad de 6 mil 492 espacios de recepción para privados de libertad y actualmente tenemos solo en los 22 centros que están bajo tutela del Sistema Penitenciario, 13 mil 447; eso le dice a usted el grado de hacinamiento que tenemos, pero lógico, dentro de los 22 centros el único centro que no tiene hacinamiento es Pavoncito, que aún tenemos espacio de unos 200 privados de libertad; Pavoncito tiene la condición de preventivo y situación de condena.

Usted habla de estructuras delictivas. ¿Cuántas han identificado y en qué cárceles están operando?
Usted se ha dado cuenta. Empezamos con traslados y aislamientos por órdenes de juez competente, derivado de investigaciones. Quiero decirle que nosotros –el Sistema Penitenciario– estamos en el esfuerzo, aunado con el Ministerio Público, Policía Nacional Civil, Dirección General de Inteligencia Civil, y todos los entes responsables a combatir el crimen organizado. En el Sistema Penitenciario usted tiene ese conocimiento, que el privado de libertad sigue cometiendo ilícitos desde dentro, hacia la población. Eso, lógico, nos lleva a nosotros a romper esas estructuras que existen dentro de los privados de libertad. Se está tratando de que no se siga con las extorsiones, tanto internas como las extorsiones hacia afuera, afectando a la sociedad guatemalteca. Usted se ha dado cuenta que hemos roto estructuras en el Centro Preventivo para Hombres de la zona 18, hemos también roto esas estructuras en la Granja Canadá, en El Boquerón, en Cantel, y nuestro esfuerzo se está llevando a todos los centros donde está existiendo ese tipo de extorsiones.

Tomando en cuenta esas estructuras que usted dice que están desarticuladas, ¿cuántas funcionan todavía en la cárcel?
Sobre los contactos que las bandas organizadas puedan tener afuera o en los centros carcelarios, le mentiría si le doy un dato exacto, pero que tienen contactos, los tienen. A eso viene el esfuerzo nuestro, en coadyuvar a combatir el crimen organizado mediante las detecciones, investigaciones, requisas que se llevan a cabo, tratando de combatir los ilícitos, tratando de evitar que existan celulares, chips, paneles solares dentro de los centros de detención, encaminados a ir restringiendo estas comunicaciones de lo interno hacia la sociedad guatemalteca. Usted sabe que ellos en algunos casos ya no tienen nada que perder estando privados de libertad, entonces se prestan desde las cárceles para llevar a cabo ese tipo de trabajo que definitivamente es coordinado con personas que están en libertad. Hay cosas que se han avanzado bastante, en el Centro Preventivo de la zona 18 ya funciona una antena de inhibición y hemos logrado casi en un 99 por ciento que no salgan señales de celulares hacia afuera.

¿Qué perímetro cubre esa antena?
Se tiene direccionada al área del Centro Preventivo de la zona 18, el Anexo y Santa Teresa. Estamos hablando de unos 15 mil metros cuadrados, o un poquito más, 20 mil metros cuadrados, pero son antenas direccionadas. Si usted entra con su celular usted ve que tiene señal, saca la llamada, absorbe la señal pero no la distribuye, por eso se llama antena de inhibición.

¿Desde cuándo empezó a funcionar esta antena de inhibición?
Tenemos como cuatro meses.

¿Cómo solucionaron el problema de los bloqueadores que no funcionaban? ¿Cómo avanza ese proceso?
Quiero comentarle que eso está siguiendo un proceso, que está en el Ministerio Público. Ellos son los perseguidores del delito, hay una denuncia formal y nosotros, pues lógico, hemos respetado el debido proceso y serán las autoridades competentes que le den la solución. Mientras tanto eso no se dilucide, nosotros vamos a estar pendientes y ver qué otros cursos de acción llevamos a cabo para combatir y tratar de que en los centros, que nosotros hemos declarado como prioritarios, evitar la señal de celular y trabajarlos, pero si esto se logra solucionar, podrían coadyuvar estos bloqueadores a ese trabajo. Podría, y me atrevo a decir “podría”, porque tiene que tener un dictamen técnico para ver si esto contribuye o no. Ahorita el estado de los bloqueadores está en stand by.

¿Cómo se implementa el sistema de antenas de inhibición? ¿Es una colaboración?
Es parte de un plan piloto que se tiene con las empresas telefónicas. Es un estudio que se está haciendo para implementarlo en los demás centros carcelarios; es parte de un plan que se tiene. Lógico, vimos que funciona, y se están haciendo los análisis en los demás centros porque ya obedecería a un contrato o un trabajo con las empresas telefónicas. En ese estudio está el porqué del servicio que ellos nos van a prestar. Aún no tenemos el costo, estamos en un proceso de análisis, pero de que funciona, funciona.

¿Cuándo podrían tomar una decisión para contratar los servicios de las empresas telefónicas?
Ahorita se están haciendo las pruebas de campo. Podría a ser a corto o mediano plazo. Estamos hablando dentro de 6 meses a un año.

A su criterio ¿Cuáles son los grupos más conflictivos o a los que más atención hay que prestar?
Nosotros hemos ido trabajando y derivado de la inteligencia, se han ido detectando grupos. Usted sabe que, lógico, todo mundo habla de las pandillas que están totalmente identificadas. A ellos se les tiene bastante empeño en supervisarlos, tenerlos controlados, pero también hay otras bandas. Usted se da cuenta lo que pasó en alta seguridad, de una banda bien organizada que extorsionaba internacionalmente en El Salvador, Honduras y allí están las pruebas de las guías telefónicas, los chips, los aparatos y hasta la forma de cómo estaban extorsionando a la población y a nivel centroamericano.

Aparte de las pandillas, ¿qué otros grupos son conflictivos?
La bandas organizadas que se dedican a las extorsiones. Creo que en este caso se tenía a los de bandas anteriores como la Banda del Indio; se tenían otros nombres, pero estas bandas puede ser que hayan desaparecido, pero los integrantes de estas bandas vuelven a ser contactadas por nuevas bandas como Agosto Negro, Canguro y todos esos. Esa gente puede ser que esté ahorita privada de libertad, pero está siendo contactada o coordinada por otras bandas nuevas que se están dedicando a la extorsión, al plagio, al secuestro.

¿Existe alguna cárcel que pueda ser modelo de rehabilitación?
Sí, ahorita tenemos el ejemplo que es Pavoncito. Es un centro de detención penal que está avanzando de la forma en que está avanzando, porque hay un liderazgo positivo.

¿Se refiere al liderazgo del capitán Byron Lima?
Él es parte “de”, pero no es sólo él. Allí hay un contagio de todos los privados de libertad. Byron es un privado de libertad que está poniendo esfuerzo en una rehabilitación eficaz, de formar un equipo y coadyuvar a una rehabilitación como la que están llevando a cabo. Nosotros como Sistema Penitenciario encontramos este tipo de trabajo. No sé si es de su conocimiento, pero dos veces Pavoncito ha ganado primero y segundo lugar en el concurso de barriletes a nivel nacional y nadie lo ha mencionado. Entonces ¿qué nos queda a nosotros? mencionarlo, si es una forma de rehabilitación.
Pavoncito tiene su horario, todo mundo estudia, todo mundo trabaja, todo mundo hace deportes y respetan ese horario, ellos mismos hacia lo interno, porque el control lo tiene el Sistema Penitenciario.

¿Cómo lograr ese control, si a veces no parece eso?
Es la percepción de algunos, porque allí los que se encuentran, son personas que quieren una oportunidad. Allí llega cualquiera, por cualquier delito, pero lo absorbe el ambiente. Allí hay un ambiente positivo. Yo tengo conocimiento y conocí Pavoncito, cuando allí eran áreas de basureros y hoy son áreas deportivas, hoy son áreas de juegos de niños y todo va avanzando. Ellos tienen una maquila de trabajo, tienen como 150 máquinas trabajando; ellos han hecho todo lo que va para los contingentes del Congo, de Haití, del Ejército. Ellos han participado, están trabajando a empresas de seguridad en lo que es calzado, el uniforme, tienen sus fábricas de pelotas, fábricas de redes. Están produciendo en gran proporción.

¿El capitán Lima le extendió una invitación para que usted vaya a ver la prisión?
A raíz, cuando yo tomé posesión, Pavoncito lo he visitado como unas 20 veces y mi objetivo de visitarlo es viabilizar a ellos esta rehabilitación. Yo no le voy a decir que vine a hacer muchas cosas, sino que ya encontré, derivado del liderazgo que existe. Ellos han avanzado y me toca como director del Sistema Penitenciario poner a todo mi equipo de trabajo a que les viabilicen la rehabilitación a ellos, porque tuvieron la iniciativa de salir adelante, porque ellos ya contaban con su cooperativa; fue iniciativa de ellos, tienen todos sus estatutos, ahorita es sólo de ayudarlos, era increíble, pues por no tener control de unas agujas que tenían que entrarles para que ellos dieran el producto terminado, había empresas de afuera que los subempleaban a ellos y no vendían directo. Hoy, bajo ese control, tienen su producto terminado y pueden vender directamente a las empresas, pero antes eran utilizados por otras empresas, había intermediarios. Ahora, no. Ellos compiten como cualquier otra empresa, suben a Guatecompras. Usted va a Pavoncito, todos trabajan, tienen un salario y allí nadie extorsiona.

¿Cómo tiene la certeza que nadie extorsiona?
Al que está tratando de extorsionar, ellos lo detectan y ellos mismos lo colocan a disposición de las autoridades, porque ellos no quieren que les afecte esos malos hábitos. De hecho, quiero comentarle, allí estaba alguien que estaba extorsionando a empresas de transporte. Lo detectaron y él les pidió una oportunidad. Hoy el amigo hace unas manualidades y cada semana se gana Q1 mil o Q2 mil por sus manualidades afuera y quien le vende sus manualidades es su esposa. ¿Dígame usted si hay necesidad de estar extorsionando?

Después de un análisis y desde su propia perspectiva, ¿usted cree que el Sistema Penitenciario está cumpliendo con la función de reinserción social?
Estamos haciendo lo más humanamente posible. Estamos haciendo todo el esfuerzo, pero usted no me dejará mentir, si existe una infraestructura ineficaz, vamos a tener una clasificación ineficaz y vamos a tener una rehabilitación ineficaz, porque la rehabilitación que tiene que tener un privado de libertad en situación de condena, no es la misma que debe tener un privado de libertad en situación preventiva. Desde esa óptica, ahorita, derivado de ese hacinamiento que existe, nos es difícil, sin embargo, estamos haciendo el esfuerzo, mediante los equipos multidisciplinarios encaminados a completarlos, que exista esa situación de que el equipo multidisciplinario pueda estar en cada centro. Nosotros, aunque sea hacinados y con una clasificación ineficaz, estamos trabajando sobre eso, que lógico, la intención del señor Presidente y del Ministro, es crear y modernizar los centros, crear obras nuevas, que nos va a venir a facilitar la rehabilitación, porque ese hacinamiento no nos permite tener el control al cien por ciento.

¿Cuántos centros están previstos crear?
Se está trabajando en los procesos de los eventos, para que después llegue a su licitación, pero eso lleva tiempo. Se tiene planeado esos dos centros de máxima y mediana seguridad que le comenté. Alta Seguridad y Boquerón, y se tiene planeado cárceles regionales y dentro de lo que se tiene también es un centro de detención penal con una rehabilitación al cien por ciento como lo es Pavoncito. Allí va encaminado a utilizar los fondos que está ofreciendo Taiwán.
En el caso de la cárcel regional, es un estudio que se tiene desde que tomamos posesión; se fue una comisión a nivel nacional a estudiar todos los centros, inclusive allí incluyen las 26 cárceles públicas de la Policía Nacional Civil y allí nos dedicamos a ese estudio, a ver la población en situación de condena y preventiva, derivado de eso nos decidimos a cuál era el lugar óptimo, entonces la regionalizamos. Eso va a venir a ayudarnos al deshacinamiento, porque son cárceles grandes que se está pensando durante esos cuatro años, para que se puedan quedar en mejores condiciones habitacionales y no solo dejarlo a solucionar el problema inmediato, sino a tener visión para cien años más.

¿Qué se necesita para que el sistema carcelario cambie, pues sabemos que existe corrupción? ¿Cuándo podrá Guatemala percibir ese cambio y dejar de ver que las personas se prestan a esa corrupción?
Cuando tengamos las condiciones necesarias habitacionales. Si usted no tiene una infraestructura eficaz, usted no va a poder combatirlo al ciento por ciento; va a hacer el esfuerzo, pero si no tiene al cien por ciento las condiciones habitacionales, eso va a ser difícil. Ahorita es el esfuerzo. Quiero comentarle que esto es un problema que gobiernos anteriores no visualizaron y lo dejaron crecer, y hoy estamos en una crisis y tuvieron la oportunidad.
Vámonos a cuatro años atrás, en el 2008, había un hacinamiento del 30 por ciento. Había una gran oportunidad de atacar el problema y no lo hicieron. Hoy estamos a un 107 por ciento y lo que se está haciendo con las fuerzas de seguridad, de combatir la criminalidad, esto va a seguir creciendo; tenemos que ir contra los mecanismos para recepcionarlos y también tenemos que encontrar los mecanismos para apoyarlos en su rehabilitación y resocialización, para que sean hombres y mujeres nuevas al lograr su libertad.

¿Qué hay de los funcionarios que trabajan en el Sistema Penitenciario? ¿Cómo evitar que el guardia, el alcaide o usted no se presten a actos de corrupción?
Uno solo no lo puede lograr. Uno necesita un equipo y de eso me he tratado de cuidar, de formar un buen equipo. Todas las personas que están entrando al Sistema Penitenciario dentro de mi administración son clasificadas, son investigadas y no puedo decirle que no me puedo equivocar en la selección, pero si me equivoco, corrijo. Lo que quiero es trabajar en equipo, que todos tengan la misma visión, que todos sepan qué norte llevamos y sabe ¿qué es lo mejor?, que usted puede dar el ejemplo, poderle ver a la cara a cualquiera y no tener el temor de desviarle la vista porque usted ha caído en un acto de corrupción. Si usted da el ejemplo, tiene toda la solvencia moral de venir y sancionar al que se esté desviando en el trabajo. Lo malo es cuando alguien entra con mentalidad de irse a enriquecer o de aprovechar el puesto, ese es el problema.

¿Usted se compromete a trabajar por Guatemala honestamente?
Yo estoy comprometido. Desde niño me comprometí con Guatemala. Yo, a los 12 años, a las seis y media, le estaba haciendo honores a mi bandera y en la noche también. Le decía, “buenas noches, Guatemala, puedes dormir en paz”. Soy soldado, además de ser abogado y administrador, soy soldado; esa mística es la que tengo que meter a mi equipo, mi mentalidad, pero yo solo no lo puedo hacer, necesito un equipo fuerte.

Cuándo iniciaba este gobierno se hablaba de la implementación de tecnología de punta, ¿cómo va este trabajo?
Dentro de lo que nosotros tenemos, la tecnología es mi segundo eje de acción. Se va a implementar en algunos centros, los famosos portales de ingreso. Ahora tenemos un portal de ingreso en el Centro Preventivo de la zona 18, que está funcionando en un 50 por ciento. No tiene funcionamiento biométrico todavía y hacia eso vamos. Esos portales empiezan a funcionar en unos dos o tres meses al cien por ciento, está en el Preventivo y en Alta Seguridad, en el Infiernito.
Con los portales estamos trabajando con una empresa certificada y sacar al guardia de ese control y que se dedique para lo que fue formado, para cuidar en su anillo de seguridad, tener el control y la custodia del privado de libertad desde sus garitas y sus controles para que sean supervisados, pero los portales que sean por una empresa responsable de los ilícitos y con la capacidad de la operativización de los portales.

¿Cree que en los años que usted pueda estar en el cargo, se pueden instalar estos portales en todos los centros carcelarios?
Un portal de ingreso podría servir para Anexo y Santa Teresa. Como hay 22 centros, vamos a pensar en un análisis; dentro de eso tenemos proyectados 17, entre portales y mini portales.

“…se pudo detectar que derivado de esos problemas de hacinamiento, pues lógico, hay ciertos grados de corrupción. Es de su conocimiento, una corrupción de estructuras que se manejan y que extorsionan desde lo interno hacia lo externo…”