A dos dí­as de la convocatoria a elecciones generales, analistas estiman que los partidos polí­ticos no cuentan con propuestas concretas, basando su campaña en eslóganes y promesas que no pueden cumplir.

Solucionar los problemas de seguridad e impulsar la cantidad de la población económicamente activa, son los caballos de batalla de las agrupaciones polí­ticas que buscan atraer simpatizantes a su movimiento; no obstante, hasta el momento los precandidatos no han justificado el plan a seguir para sus proyectos.

Para el analista ílvaro Pop, esto sucede a pesar de tener una amplia y prematura plataforma de campaña, que se ha anticipado a la convocatoria.

Según Pop, la precampaña la han utilizado los aspirantes a la silla presidencial para jugar a la demagogia, gastando las preocupaciones más í­ntimas que mantiene la población de los problemas que aquejan a la sociedad guatemalteca como lo son los niveles de violencia y la escasez de empleos.

Por su parte José Dávila, del Instituto Centroamericano de Asuntos Polí­ticos (INCEP), afirma que hasta el momento existe una abundancia de eslóganes y canciones emotivas omitiendo los planes concretos y los medios para conseguirlos.

«La calidad del proceso electoral va en relación directa con los planes y propuestas que surjan de la oferta polí­tica» afirma el analista, agregando que el INCEP espera que los actores de la carrera electoral maduren en los tres meses siguientes con proyectos viables, acordes a la realidad.

Causantes de apatí­a electoral

Esta forma de hacer polí­tica es la que, estiman ambos especialistas, estimula la apatí­a entre la ciudadaní­a que toma distancia al considerar que se les trata de engañar.

«El guatemalteco sabe que le están anunciando proyectos incumplibles, es decir, que intentan engañarlo» asegura ílvaro Pop, razón por la que cree que la medida que debe de tomarse es exigir a los candidatos que argumenten cuáles serán los vehí­culos para alcanzar tales promesas.

Por su parte Dávila refiere que es la inclusión de las necesidades de las poblaciones en los planes de gobierno lo que puede ayudar a atraer a la población que ha dejado de creer en el proceso.