Luego de los desastres ocurridos por las lluvias en La Unión, Zacapa; Poptún, Petén; Senahú, Alta Verapaz y la capital, desde el Congreso ya visualizan la urgente necesidad de recursos económicos específicos para rehabilitar caminos y reconstrucción de comunidades.
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Según Noé Orellana, presidente de la Comisión de Comunicaciones, por falta de previsión del Ejecutivo no existe un fondo común para enfrentar esa clase de contingencias.
La actual administración no ha podido designar más que Q 50 millones del presupuesto de Foguavi, pero ya se calcula la necesidad mínima de Q 350 millones, que no serán suficientes, para solucionar los problemas inmediatos, dijo.
Está en estudio la cifra razonable que creen debe ser superior a la anotada, y que el Gobierno está buscando en presupuestos no ejecutados este año. Caso contrario, la comisión estimará la cantidad y la fuente de financiamiento esta semana, agregó Orellana.
Visión del pasado es necesaria
Ante las amenazas futuras del clima, esperarían que el Ejecutivo haga uso de su iniciativa de ley para prever una cifra específica en el próximo presupuesto del Estado, porque ahora se quejan por falta de fondos, mientras la situación para las poblaciones vulnerables está complicada, visualizó el parlamentario.
El ex ministro de Finanzas Públicas, Eduardo Weymann, indicó que durante su gestión se sugirió la necesidad de un presupuesto de US$ 50 millones para enfrentar consecuencias del clima, menores a las que hoy ocurren, pero analizó que en la actualidad deberían ser como mínimo US$ 100 millones de reserva, porque los riesgos y costes han aumentado.
No es tema de emergencia
El titular de la cartera del tesoro nacional, Juan Alberto Fuentes, dijo que son optimistas que va a pasar la aprobación de la ley, para la ampliación presupuestaria por mil 400 millones de quetzales, y así continuar con el desarrollo del mapa geográfico de obras y cubrir la deuda flotante del Ministerio de Comunicaciones.
Parte de esa ampliación está contemplada para que sean destinados recursos a Conservación Vial (Covial), que deberá enfocar parte de su trabajo a la recuperación y mantenimiento de las vías de comunicación dañadas por las lluvias de los últimos ocho días.
El optimismo y paciencia del ministro, que contrasta con las necesidades atrasadas por paralización de obras y debido a los daños por lluvias en puntos específicos, deberá esperar una semana más, ya que el pleno del Congreso no reactivará su rutina de trabajo sino a partir de agosto próximo.
Falta conocer qué soluciones inmediatas podría proponer el Ejecutivo esta semana, para no depender del tiempo y decisión política de los diputados para resolver las emergencias.