Las conversaciones sobre el programa nuclear norcoreano terminaron el viernes en Pekín sin establecer un calendario para las próximas etapas de la desnuclearización, pero Corea del Norte reiteró su compromiso de declarar y desactivar todas sus instalaciones atómicas.
Corea del Norte «reiteró que cumplirá su promesa de suministrar una lista completa de todos sus programas nucleares y de desactivar todas sus instalaciones nucleares», pero todavía no se decidió un calendario, indicó el viernes un comunicado del ministerio chino de Relaciones Exteriores difundido públicamente al final de una nueva sesión de tres días de discusiones.
En estas conversaciones, que comenzaron el miércoles, participaron las dos Coreas, Estados Unidos, China, Japón y Rusia.
Antes de partir de la capital china, el emisario estadounidense Christopher Hill afirmó que «todo era posible antes de fines de año», aunque destacó que esos tres días constituyeron la reunión «más productiva de todo el proceso de negociaciones de los Seis».
Al referirse al cierre de la principal instalación atómica norcoreana, en Yongbyon, confirmada el miércoles por la Agencia Internacional de Energía Atómica, el delegado norteamericano consideró que los participantes tienen ahora «una visión clara de hacia dónde nos dirigimos».
«Yo estoy satisfecho, también tuve buenas reuniones bilaterales con los norcoreanos. Estoy muy, muy satisfecho», reiteró el diplomático.
«Evidentemente hubiéramos logrado muchos más progresos de los previstos si nos hubiésemos puesto de acuerdo en una hoja de ruta, con una fecha límite, pero no habíamos venido aquí con semejante objetivo», declaró por su parte el emisario surcoreano Chun Yung-woo.
El comunicado final del presidente de la reunión, el negociador chino Wu Dawei, se refiere a «un consenso general» para continuar la desnuclearización del régimen comunista, reiterando igualmente que Corea del Norte recibirá a cambio «una ayuda económica, energética y humanitaria equivalente a 950.000 toneladas de fuel pesado».
Esta ayuda debe ser otorgada a Corea del Norte después de la «desactivación completa» de todas sus instalaciones atómicas, la segunda etapa de un acuerdo multilateral firmado el 13 de febrero en Pekín.
En virtud de ese acuerdo, Corea del Norte debía en primer lugar cerrar Yongbyon y luego declarar todos sus programas nucleares y desactivarlos.
Los cinco grupos de trabajo, instaurados después del acuerdo de febrero, se reunirán antes de fines del mes de agosto y una nueva sesión de negociaciones tendrá lugar en los diez primeros días de setiembre «para formular una hoja de ruta con miras a la aplicación del consenso general», precisa el comunicado chino.
Según un miembro de la delegación surcoreana, la primera reunión, la del grupo de trabajo encargado de la cooperación económica y energética, podría tener lugar a partir del 6 de agosto.
Las conversaciones de los Seis comenzaron en 2003, con la finalidad de desnuclearizar a Corea del Norte, un país que en esa época recién estaba en la etapa de desarrollo del arma atómica. Después, el régimen comunista norcoreano llegó al nivel de potencia nuclear, haciendo explotar el 9 de octubre de 2006 su primera bomba atómica.
Christopher Hill, negociador estadounidense.