Si usted es un maestro inculque en sus alumnos la veneración por los héroes y mártires de los grandes acontecimientos, por ejemplo, la independencia o emancipación de América. Uno de los próceres fue Simón Bolívar, El Libertador de la América del Sur. Nació en Caracas el 24 de julio de 1783 y murió en Santa Marta, Colombia, 17 de diciembre de 1830.
Quedó huérfano desde temprana edad y fue alumno de Andrés Bello y de Simón Rodríguez.
En Europa presenció la coronación de Napoleón Bonaparte y conoció a Humboldt. Se afilió a la masonería. Juró en el Monte Sacro, Roma, libertad a su patria del dominio español.
En la primera revolución venezolana tomaron parte los ricos criollos mantuanos, dueños de haciendas. La lucha dio inicio en abril de 1810. Bolívar salió comisionado a Inglaterra en busca de apoyo.
En 1812 un fuerte terremoto destruyó Caracas, el clero hizo ver que era un castigo divino en contra de los patriotas que luchaban por la libertad.
Francisco de Miranda fue capturado, reducido a prisión y enviado a España. La participación de Bolívar en este penoso suceso debiera ser estudiado más a fondo antes de ser criticado.
La «Guerra a muerte» causó mucho sufrimiento en 1813.
En la segunda revolución venezolana en 1814, Bolívar dirigió las campañas militares. Tuvo participación en Cartagena, Colombia.
En 1814 regresó al trono de Fernando VII y declaró el absolutismo y la restauración de la soberanía española.
Bolívar justificó la revolución en su célebre carta de Jamaica, en 1815.
La tercera revolución venezolana en 1816 contó con el apoyo del presidente de Haití, Alejandro Petión. Bolívar declaró la libertad de los negros. Sufrió una derrota en Clarines el 9 de enero de 1817.
En este año reanudó la campaña en contra del jefe militar realista Pablo Morillo. Obtuvo triunfos y nuevas derrotas.
En el Congreso de Angostura dio a conocer el proyecto de unir Venezuela con Nueva Granada.
En mayo de 1819 inició la campaña de Nueva Granada, por los Llanos y Los Andes y en las cercanías de Tunja la célebre batalla de Boyacá, huyendo el virrey Juan de Sámano de la ciudad de Bogotá.
En el año citado quedó formada la República de Colombia.
La sublevación de Rafael de Riego en España en 1820. Obligó al gobierno a reconocer la Constitución de Cádiz.
Pablo Morillo regresó a España, asumiendo el mando militar Miguel de la Torre.
En la batalla de Carabobo Bolívar obtuvo un triunfo, el 25 de junio de 1821, poniendo fin al dominio español en Venezuela.
La decisiva batalla de Pichincha, el 24 de mayo de 1822, Sucre triunfó sobre Melchor Aymerich, logrando la independencia de Quito, y luego la incorporación a la Gran Colombia, proyecto de Bolívar.
Los días 26 y 27 de julio de 1822 se realizó la histórica entrevista de Guayaquil entre San Martín y Bolívar, en donde el primero se retiró, dejando el campo libre a Bolívar para libertar al Perú.
El 6 de agosto de 1824 Bolívar triunfó en Junín sobre José de Canterac, lo que obligó al virrey José de La Serna a reunir lo que quedaba de los ejércitos, formados por soldados nacidos en América en su mayoría, quedó derrotado La Serna en Ayacucho, el 9 de diciembre de 1824, poniendo fin al dominio español en el continente.
José Martí dijo de Bolívar: «Murió pobre y dejó una familia de ricos».
Bolívar expresó en su juramento: «Juro por el Dios de mis padres; juro por ellos; juro por mi honor; juro por la Patria, que no daré descanso a mi brazo, ni reposo a mi alma, hasta que haya roto las cadenas que nos oprimen por voluntad del poder español».
De sí mismo expresó: Bolívar es incapaz de corromper a sus amigos porque nada puede pretender que no sea justo.