Mis contados lectores posiblemente recordarán que el jueves anterior publiqué un artículo acerca de las causas que provocan el abstencionismo en los procesos electorales, basándome en parte en un libro que, al respecto, publicaron los sociólogos Edelberto Torres Rivas y Horacio Boneo, además de agregar otros factores propios de la actual campaña política.
Por lo reducido de mi espacio sólo daré cabida resumidamente a pocas acotaciones publicadas en el portal de La Hora de quienes opinan en torno al fenómeno del abstencionismo y a un correo que recibí en mi buzón electrónico.
Comenzaré con el parecer de la periodista Blanca Rosa González, quien afirma que los ciudadanos que no votan es porque “Cada cuatro años nos dan un poco menos de lo mismo, es decir, que cada vez hay más candidatos, pero todos cortados con la misma tijera. Ofertas y compromisos que saben que jamás van a cumplir, mientras engañan al votanteâ€.
Puntualiza con una razón contundente para abstenerse de sufragar, arguyendo que debe anularse el voto, “para no regalarle 2 dólares a determinado partido político†corrupto y para demostrar que “nuestra opinión cuenta, en el sentido de que ninguno de los candidatos convence, desde los genocidas hasta los narcos, farsantes y oligarcasâ€, asevera lapidariamente.
El problema del abstencionismo “es que los guatemaltecos ya estamos cansados de las mismas falsas promesas de los candidatos cada cuatro añosâ€, asevera Laura Mejía, quien añade que “Sandra Torres ejerció y ejerce una labor socialâ€, y por eso “hay gente que sigue confiando en ellaâ€.
El lector Carlos René Baeza estima que “mientras no cambien las actuales estructuras del Estado, el abstencionismo se incrementará, pues los partiduchos (sic) son producto del sistema oligárquico que los obliga a seguir defendiendo los intereses de su clase, y en tanto que en otros países están superando su subdesarrollo económico, político y social, aquí vamos para atrás. Los planes de gobierno son PP –Pura Paja, aclara–, y por eso no convencen para arrancarle (sic) el voto a los ciudadanosâ€.
Por su parte, Eliseo Divas, aunque escéptico, confía en que “la gente venga a votar, (pero) razonando su voto y no sólo por el impulso de no hacerlo. Mientras los candidatos no expongan realidades, y no fallidas promesas, puede que las cosas cambien; de lo contrario, seguiremos cometiendo los mismos erroresâ€.
El poeta í‰lder Exvedi Morales afirma que “La frustración es muy evidente, y por eso es que en algunas regiones del país todo aquel que se dedica a la política partidista es señalado de ladrónâ€.
Gilberto Ramírez Bermúdez me escribió para subrayar que “Hasta la izquierda oficial se ha contaminado de la corrupción y de la presencia de dinosaurios que son funcionarios del actual Gobiernoâ€.
(El vagabundo Romualdo Tishudo deambula por un cementerio pueblerino y en la tumba de un diputado que en tres períodos nunca presentó una iniciativa de ley y en las sesiones del Congreso sólo alzaba la mano, lee en su lápida este epitafio: –Aquí sigue descansado el huevonazo y ladronote líder local).