Los españoles valoran de forma «positiva» la presencia de inmigrantes en su país, pero consideran que su número es «excesivo», según un estudio adelantado el miércoles por el gobierno español que destacó la «madurez» de los ciudadanos frente al fenómeno migratorio.
«Existe una inequívoca posición de la ciudadanía española para valorar rotundamente de forma positiva la inmigración, pero convive la sensación de que el número de inmigrantes es excesivo», explicó la secretaria de Estado español de Inmigración y Emigración, Consuelo Rumí, al presentar estos resultados.
El 69,7% de los consultados entre noviembre y diciembre de 2006, cree que es «positivo» para la sociedad estar compuesta por personas de origen racial, religioso y cultural diferente. Pero un nada despreciable 13% piensa que es «negativo».
Al mismo tiempo, el 61,8% de los encuestados considera que es «excesivo» el número de inmigrantes que hay en España (ndlr: 3,7 millones) contra el 28,3% que lo califica de «aceptable».
«Esta paradoja tiene que ver con la llegada de gran número de personas en tan poco tiempo» a España, aunque «esto no significa rechazo a la inmigración», aclaró Rumí.
Según la secretaria de Estado, estos datos «muestran que no existen motivos de alarma» y ponen de relevancia «la madurez de la sociedad española que se muestra mayoritariamente favorable a la diversidad».
Claro que «esto no desconoce los riesgos y problemas de cualquier sociedad con presencia inmigrante», admitió la responsable.
En efecto, el estudio muestra «indicadores» a tener en cuenta para evitar situaciones de discriminación, racismo o xenofobia.
El 25,7% de los consultados trataría de evitar alquilar un piso a un inmigrante; el 17,1% trataría de evitar vivir en el mismo edificio que inmigrantes; el 14,5% que su hijo se case con un inmigrante, el 13,6% vivir en el mismo barrio y el 5,1% trabajar con inmigrantes.
El gobierno trabajará a partir de estos indicadores para afinar el mensaje que quiere transmitir a la población, dos años después de haber llevado adelante un proceso extraordinario que permitió la regularización de 570 mil extranjeros que trabajaban en negro y que ahora hacen aportan a la seguridad social española.
«Vamos a reforzar acciones de información a la población y educación para corregir indicadores que alertan sobre actitudes racistas», afirmó Amapola Blasco, directora del Observatorio Español del Racismo y la Xenofobia, que por segundo año consecutivo lleva adelante este estudio de opinión.
El 73,7% de los consultados piensa que los inmigrantes hacen una «importante contribución» al desarrollo económico de España, pero sólo el 11,5% cree que contribuyen «mucho» al enriquecimiento de la cultura española. Para el 18,4% no contribuyen «nada» en ese aspecto.
¿Por qué los españoles valoran más el aporte económico que el cultural?
La respuesta del gobierno es que «estamos en los primeros estadios» de presencia de inmigrantes en España y para que los españoles valoren los aportes culturales de la inmigración «se requiere más tiempo».
La población inmigrante se cuadruplicó en España en los últimos diez años, pasando de medio millón de personas a casi cuatro millones en 2006, en su mayoría latinoamericanos y marroquíes.
En todo caso, cuando se habla de inmigrantes, el 27,3% de los españoles piensa primero en los latinoamericanos y en segundo lugar en los de origen árabe, según este sondeo efectuado entre 2.400 personas.
Para favorecer la «cohesión social», el gobierno dirigido por el socialista José Luis Rodríguez Zapatero, aprobó en febrero un plan «estratégico de ciudadanía e integración» dotado de 2.000 millones de euros hasta 2010.
Los datos del estudio «confirman que el gobierno trabaja en la buena dirección», sostuvo Rumí, antes de recordar que España fue un país de emigrantes, y que 1,5 millones de españoles viven en otros países.
El fundador de Microsft, Bill Gates, el hombre más rico del mundo, criticó la política migratoria de su país al asegurar que la administración de George W. Bush limita, a través de visados, el ingreso de talento humano, en una entrevista publicada este martes.
«Los Estados Unidos han sido muy afortunados porque mucha gente inteligente quería ir. Y si usted mira (la composición del) Departamento de Computación de Estados Unidos, la mitad es gente nacida afuera», dijo Gates, en diálogo con el privado canal de TV, RCN.
«Pero ahora, el país está limitando, a través de visas y las residencias, impidiendo que la gente entre y eso lo hace difícil. La gente tiene que darle la bienvenida a los muy diestros no importa de donde sean», añadió Gates que participó en Colombia de la reunión de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP).
Según el magnate, en materia de inmigración, «otros países lo están haciendo mejor que Estados Unidos y (la política de Bush en ese frente) es probablemente un error». Gates también señaló que frente al tema de educación, su país solía estar de primero «pero ahora hay otros países que claramente lo están haciendo mejor».
Gates llegó la noche del domingo a Cartagena, 1.000 km al norte de Bogotá, para una visita de un día, durante la cual habló ante la reunión de medio año de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) y luego asistió a un encuentro con 140 líderes y funcionarios gubernamentales de la región.