El 2006 fue el año de Shakira: fue la reina de los Grammy latinos y del Mundial de fútbol de Alemania y su gira ’Fijación Oral’ llenó estadios de América y Europa, pero también logró, con la fundación Pies Descalzos, el compromiso de los millonarios de América con los más pobres.
Con 29 años de edad, un ritmo envolvente y magia en sus caderas, la rubia Shakira se convirtió en la artista latinoamericana con mayor éxito en el 2006: en abril arrasó con seis premios de los Latin Billboard Awards, conquistó el MTV Latino al Disco del Año 2006 y su segundo Grammy en la categoría anglo.
A título individual, Shakira logró los premios al mejor álbum del año, mejor álbum vocal pop femenino, mejor composición del año por la canción «La tortura», y mejor grabación (mejor sencillo), también por «La tortura». El álbum se alzó con el galardón a la mejor ingeniería en los Grammy latinos.
Además, su ambiciosa gira ’Fijación Oral’ -que comenzó en junio y que incluye alrededor de 100 conciertos en las principales capitales del mundo- es tan exitosa que, en ocasiones, ha tenido que programar nuevas presentaciones ante la demanda del público.
En el 2006 Shakira llenó estadios en España, Rusia, Grecia y todas las naciones latinoamericanas. En Estados Unidos, su presentación ocupa un lugar en el Top 10 de conciertos tras lograr recaudar más de un millón de dólares por función, superando a Red Hot Chili Peppers, Aerosmith y Mariah Carey.
Su pegajosa canción ’Hips dont lie’ (Las caderas no mienten), con ritmos caribeños, frases en español, máscaras y una alegoría al carnaval de su natal Barranquilla, fue el show central de clausura del campeonato mundial de fútbol de Alemania, visto por cientos de millones de personas en todo el planeta.
Con esa canción, la colombiana rompió varios récords: con 265 mil 500 descargas se convirtió en la canción más bajada de Internet y en la más escuchada en Estados Unidos. En tan sólo una semana sonó 9 mil 657 veces en las emisoras estadounidenses.