El presidente de Panamá, Martín Torrijos, otorgó el «asilo diplomático permanente» a varios ex mandatarios latinoamericanos que son reclamados por la justicia de sus países por delitos relacionados con la violación de derechos humanos y corrupción, informó hoy la prensa panameña.
Esta medida adoptada por Torrijos trece días antes de concluir su mandato, favorece, según el diario Panamá América, al haitiano Raúl Cedras, al guatemalteco Jorge Serrano Elías y al ecuatoriano Abadalá Bucaram.
Los tres ex mandatarios residen en Panamá desde la década del noventa, pero sólo ahora se les concede el asilo permanente, según el rotativo.
El asilo se hace extensivo a las esposas e hijos de cada uno de los ex gobernantes y a Michelime Valberty, asistente de Cedras.
Abdalá Bucaram, conocido como el «Loco», fue destituido en 1997 por el congreso ecuatoriano por «incapacidad mental» para gobernar y desde su salida de Ecuador vice en Panamá con su esposa e hijos.
El ex general Cedras, que derrocó al presidente constitucional Jean Bertrand Aristide y después fue destronado por una invasión norteamericana en 1994, vive desde entonces en Panamá, a donde llegó acompañado de su asistente y de su esposa e hijos.
El guatemalteco Serrano Elías, quien gobernó Guatemala de 1991 a 1994, también vive en Panamá en compañía de su familia.
Desde los distintos países de los agraciados con el asilo, las autoridades judiciales han pedido a las autoridades panameñas revocar la condición de asilados para que puedan ser juzgados en sus respectivos países por los cargos de corrupción y violación de derechos humanos de los que se les acusa.
Sin embargo, todos ellos llevan una vida tranquila en Panamá donde se dedican a sus actividades privadas.