La peor sequía en décadas en Argentina, que llevó al gobierno a declarar en emergencia la fértil pampa húmeda, recortará a alrededor de la mitad el crecimiento económico de 4% previsto para este año, según cálculos de la Sociedad Rural, que agrupa a las mayores empresas del sector.
La entidad calculó que por la merma en la producción de los principales cultivos deben restarse 1,6 puntos porcentuales al crecimiento del producto interno bruto (PIB) esperado por las autoridades.
El informe empresario advirtió que si se tiene en cuenta el efecto de la sequía sobre toda la actividad agroindustrial, el perjuicio será mayor.
El estudio de la posible evolución del valor agregado para los principales cultivos vaticinó que la producción de trigo mermará 49% respecto a la cosecha anterior, el maíz 34%, la soja 17%, el sorgo 15% y el girasol 40%.
«Con este escenario y la participación de cada uno de estos rubros en el PIB, a precios constantes, se puede estimar que la pérdida por la menor producción por la sequía restaría 1,6 por ciento del PIB», señaló la Sociedad Rural.