Con el respeto que merece su importante investidura, me dirijo a usted con el objeto de preguntarle en forma directa: ¿Considera usted que no hay hambruna en Guatemala? En su forma particular de pensar, me gustaría mucho saber su opinión respecto de las declaraciones vertidas por el señor Celso Cerezo, quien funge como ministro de Salud, en su gabinete presidencial.
fermo@intelnet.net.gt
La población que vio y leyó el periódico Nuestro Diario el último día viernes, se conmovió ante la fotografía que apareció en primera plana, donde una niña en estado de salud calamitoso intentaba comer. La sola fotografía causa repulsa e indignación en contra del sistema de salud en Guatemala; ¿vio usted la foto a que me refiero?
Entiendo que no es lo mismo, «verla venir, que venir con ella», es decir, que hacer gobierno es tan difícil como delicado, porque ello trae aparejadas obligaciones especiales que se deben cumplir sin excusa ni pretexto, tal el caso de la famosa «Asistencia Social» del Ministerio de Salud o bien la «Previsión Social» del Ministerio de Trabajo.
Lástima que los guatemaltecos no sabemos utilizar las leyes que nos dan poder para enjuiciar a todos los gobernantes y ex gobernantes del país, (entiéndase como gobernantes a presidentes y ex presidentes de la República, vicepresidentes y ex vicepresidentes, ministros y ex ministros de Estado, secretarios y ex secretarios de las Secretarías de Estado, comisionados y ex comisionados presidenciales, directores y ex directores generales, directores y ex directores de los hospitales nacionales, por la pasada, clara y flagrante comisión de delitos de OMISIí“N, INCUMPLIMIENTO DE DEBERES y conductas NEGLIGENTES, INDOLENCIA, INDIFERENCIA e INEPTITUD plenamente manifestadas y documentadas en sus declaraciones a los medios de comunicación.
Señor Presidente, exija a quienes hacen gobierno con usted, QUE YA NO SE QUEJEN DE QUE NO TIENEN PRESUPUESTO, QUE NO TIENEN INSUMOS, QUE NO TIENEN FONDOS, QUE NO TIENEN… QUE NO TIENEN? ¡Ya basta de tanta pereza mental de dichos funcionarios! Si no saben realizar el trabajo ¡DESPíDALOS! personas como el actual ministro de Salud y otros más, están desprestigiando la línea política socialdemócrata que usted ha principiado a imprimir a las acciones gubernamentales.
El pueblo se queda estupefacto por las declaraciones mentecatas vertidas por algunos ministros y sus voceros presidenciales; su falta de educación, arrogancia, prepotencia y petulancia le resta credibilidad a su gobierno. Su prestigio como gobernante debe ser rescatado por usted mismo con sus acciones correctas; enmiende el error cometido con el médico pediatra en Jalapa, acompáñese de funcionarios afines ideológicos y capaces de trabajar con el presupuesto e insumos existentes. SI NO PUEDEN, ¡QUí‰ RENUNCIEN!